Los días soleados y el terraceo pregonan su buena relación

El 2021 finalizó con un diciembre muy atípico en lo que se refiere al tiempo, de forma que las precipitaciones fueron mucho más escasas de lo habitual y las temperaturas parecían más propias de primavera que de invierno. Así, como informó recientemente EL CORREO, durante varios días y noches se mantuvieron temperaturas más elevadas que en algunos de los días menos calurosos del mes de Agosto en Santiago. La excepcionalidad de las temperaturas fue tal, que se superaron en aproximadamente dos grados las máximas registradas en días como Nochevieja. Esto, al coincidir en un año en pandemia y con un mal momento epidemiológico, hizo que mucha gente lamentase no poder aprovechar la ocasión de festejar las navidades y Año Nuevo por todo lo alto.

Y ahora, a mediados de enero, podemos afirmar que la situación apenas ha cambiado. Después del “veranillo” de Fin de Año, las temperaturas se han reducido considerablemente, aproximándose más a las habituales en esta época del año. Sin embargo, en las últimas dos semanas las precipitaciones siguen siendo bastante escasas, a la par que la ciudad disfruta de unos días en los que las nubes no hacen acto de presencia, dando paso a la claridad y la luz solar, al menos, hasta que anochece.

Y si bien las temperaturas ya son las típicas del frío invierno compostelano, que ayer marcaron una mínima de 1, 3º en el centro de la ciudad, según datos ofrecidos por José Ángel Docobo, director del Observatorio Astronómico, lo cierto es que el ambiente soleado está animando a muchos vecinos a disfrutar de las terrazas de los bares. Estas se han visto abarrotadas durante toda la semana, especialmente en puntos tan neurálgicos como la Plaza Roja o el casco histórico.

En los próximos días Meteogalicia espera que las temperaturas se eleven ligeramente, hasta los 5 o 6 grados, por lo que si las lluvias no lo estropean (y parece que no harán presencia) las terrazas seguirán a tope.