Los estudiantes se apuntan a la moda de las fiestas ‘prefindeaño’

La moda de celebrar la Nochevieja por anticipado ya ha llegado a Santiago. Si hace unos días eran los universitarios de Salamanca los que saltaban a los titulares por organizar un gran cotillón de Fin de Año en la plaza Mayor de la ciudad estudiantil, sin respetar las normas covid, ahora han sido los universitarios compostelanos los que han decidido celebrar la Nochevieja antes de tiempo, pero con una pequeña diferencia: la organizaron en una discoteca y ajustándose al protocolo fijado contra la pandemia.

Así, la discoteca Facultad acogió en la madrugada del jueves la fiesta Prefinde, en la que se dieron cita numerosos estudiantes ataviados con sus mejores galas. Ellos, con traje de chaqueta, corbata o pajarita, y ellas con vestidos de lentejuelas o terciopelo y maquillajes en los que había mucha purpurina.

Y es que los jóvenes, al igual que los mayores, llevan demasiado tiempo sin celebrar una fiesta en condiciones y todo apunta a que las restricciones van a ir en aumento, por lo que quieren aprovechar los últimos días antes de las vacaciones navideñas y de los exámenes para poder pasarlo bien y sociabilizar.

Eso sí, a diferencia de los estudiantes salmantinos, optaron por hacerlo en una discoteca, en la que para entrar es necesario tener el pasaporte covid.

La fiesta de Facultad contó con un original photocall en el que no faltó un colchón, en alusión a las fotos que se hicieron virales en Instagram a través de la popular cuenta @salseo_usc, en las que los universitarios se hacían fotos en la calle, sentados en colchones y sofás abandonados y que durante semanas invadieron las redes sociales y se convirtieron en el reto de moda entre los jóvenes santiagueses.

Afortunadamente, la noche de fiesta se saldó sin grandes incidentes. En la parte negativa, según consta en el parte de incidencias de la Policía Local, se denunció a tres personas, a las 05.30 horas, en la calle República del Salvador por falta de respeto y consideración a los agentes de la autoridad, conducta que se repite cada vez más durante las noches de movida.

De hecho, desde el inicio del curso universitario este tipo de denuncias se están convirtiendo en muy habituales y prácticamente todas las noches hay alguna. Asimismo, las multas por beber alcohol en la calle son muy comunes y en la madrugada del miércoles se sancionó a otra persona por este motivo.

Además, los agentes realizaron un trabajo de control de masas en la calle República del Salvador, donde tiene la salida la discoteca Facultad, y en Curros Enríquez, donde se concentran los jóvenes que acuden a la discoteca Ruta.

Los jóvenes que participaron en esta fiesta prefinde pudieron terminar la noche con el tradicional chocolate con churros, que se encargó de servir un popular establecimiento 24 horas del Ensanche de la capital gallega. De este modo, los universitarios pusieron el broche de oro a una velada llena de diversión y buenos momentos, aderezados con mucho brilli brilli.