Mazarelos se quedará sin bolardos si funciona bien la peatonalización
A partir de mañana se comenzará a colocar la nueva señalización para empezar el martes
Santiago. Después de que la junta de gobierno diera el lunes el visto bueno al proyecto de peatonalización de la plaza de Mazarelos durante las tardes, mañana jueves está previsto que se comience a colocar la señalización indicadora para cerrar la zona a la circulación a partir de la tarde del próximo martes.
El proyecto, tal y como había avanzado este periódico, tiene como objetivo conseguir un mayor aprovechamiento de un espacio que fue uno de los pocos que quedaron fuera de la peatonalización del casco histórico llevada a cabo el pasado siglo.
Se trata además de un espacio que registra un intenso paso de peatones durante todo el día, tanto vecinos, como comerciantes y visitantes, que tienen que convivir con el tráfico diario. De esta forma, y atendiendo a las peticiones de los residentes, el Departamento de Mobilidade inició un estudio para evaluar la posibilidad de cerrar la zona a los vehículos.
En principio, se seguirá permitiendo el tránsito durante las mañanas, coincidiendo con las horas de funcionamiento de la Plaza de Abastos. Por ello, lo que se proyecta es que a partir de las tres de la tarde durante la semana solo puedan acceder a este punto los vehículos autorizados de los residentes, y los de reparto de mercancías para el casco histórico.
En este sentido, además de facilitar que los peatones puedan disfrutar de este espacio, también está la protección del patrimonio histórico, ya que el hecho de que la única puerta que queda de lo que en tiempos fue el recinto amurallado de la ciudad, es lugar de paso a diario de numerosos vehículos, muchos de ellos, de grandes dimensiones.
También se ha detectado un intenso tráfico nocturno relacionado con los locales de ocio existentes en la zona monumental, y que no está directamente vinculado con el uso residencial o comercial de este espacio, que es lo que pretende preservar.
Además, el concejal de Tráfico, Gonzalo Muíños, afirmó ayer en el programa Compostela en la Onda, que no descartan la posibilidad incluso de que si la experiencia resulta positiva, se estudie la eliminación de los numerosos bolardos que existen a lo largo del recorrido, y que ya han provocado más de un disgusto tanto a conductores como a peatones despistados. ecg