Pesar por la muerte del compositor Antón García Abril, muy vinculado a Santiago
Fue uno de los impulsores del curso Música en Compostela y de la Escola de Altos Estudos
Profundo pesar causó de una manera especial en la capital gallega el fallecimiento del reconocido compositor Antón García Abril, uno de los fundadores del grupo Nueva Música (1958) y creador de más de 200 bandas sonoras para cine y televisión como las de Los santos inocentes o El crimen de Cuenca. Muy arraigado a los cursos internacionales Música en Compostela y a la Escola de Altos Etudos Musicais, murió este miércoles en Madrid, a los 87 años, rodeado de sus cuatro hijos y la memoria de su esposa, Áurea Ruiz, fallecida hace cinco años, y con sus nueve nietos sumidos en la tristeza de haber perdido al abuelo que contribuyó a transformar la música en su país.
Y es que el maestro deja tras de sí un gran legado musical compuesto por obras para orquesta, cantatas, conciertos, música de cámara y más de 200 bandas sonoras para cine y televisión, como Sor Citroën, Vente a Alemania, Pepe o La ciudad no es para mí, protagonizada por el recordado Paco Martínez Soria, entre otras.
También compuso para la televisión sintonías de series como El Hombre y la Tierra, Anillos de Oro, Segunda enseñanza, Brigada Central, Compuesta y sin novio, Ramón y Cajal o Fortunata y Jacinta.
Miembro de la denominada Generación del 51 y uno de los fundadores del grupo Nueva Música, la larga carrera de composición del turolense ha sido reconocida en los foros de mayor prestigio nacional e internacional.
Recibió galardones como el Premio Nacional de Teatro (1971), el Premio Nacional de Pedagogía e Investigación Musical (1991), el Premio Nacional de Música (1993), la Medalla de Oro de las Bellas Artes (1998), o el Premio SGAE de la Música Iberoamericana Tomás Luis de Victoria (2006).
En su faceta didáctica destaca su labor pedagógica al frente de la cátedra de Composición y Formas Musicales del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid. Durante casi treinta años ejerció esta actividad docente de manera continuada. En 1989 compuso el himno de Aragón por encargo de las Cortes de dicha comunidad autónoma.
Su trabajo de composición musical para el audiovisual se vio reconocido en octubre de 2014, cuando la Academia de Cine le otorgó su Medalla de Oro. En mayo de 2018 celebró su 85 cumpleaños con la publicación de un nuevo disco y un concierto que tuvo lugar en la Real Academia de las Bellas Artes de San Fernando en Madrid, de la que era miembro desde 1982.
Por su parte, la Escola de Altos Estudos Musicais y la Real Filharmonía de Galicia manifestaron ayer su profundo dolor por tan triste pérdida.