Premio internacional al proyecto compostelano que conectó a pacientes COVID con sus familias

Una experiencia personal dura, el fallecimiento de su madre, llevó a la subdirectora de la Cátedra de Cronicidad de la USC, Montse Sánchez-Agustino, a organizar un proyecto que conectase a los pacientes con sus familias. Las escogidas fueron las personas con COVID, aisladas en los hospitales sin poder recibir visitas de familiares, de edad avanzada o con problemas para realizar este contacto. Gracias a Higea, el nombre con el que se bautizó a esta iniciativa, se han realizado desde diciembre de 2020 casi 900 conexiones en el Hospital Clínico: más de la mitad videollamadas personales, un 31 % videollamadas múltiples con más familiares, y una mínima parte corresponde a llamadas sin vídeo tanto personales como múltiples.

El prestigioso galardón, otorgado por Janssen Pharmaceutical Companies of Johnson & Johnson en colaboración con Cátedras en Red, contó en el jurado con destacados y reconocidos representantes de todos los ámbitos del sector de la salud, que reconocieron la relevancia de Higea entre los más de 500 proyectos presentados en esta edición. Los premiados de cada categoría, según la propia organización, responden a las iniciativas y personas que mejor han sabido transmitir los valores de afectividad, efectividad, innovación, compromiso y humanidad.

Sánchez-Agustino dedicó el galardón a su madre y a las voluntarias y voluntarios -estudiantes de Medicina y Enfermería- que a lo largo de estos meses la han acompañado en esta acción solidaria destinada a llevar una voz amiga a pacientes y familiares, haciendo una labor de humanización hospitalaria. “Fuimos a las plantas COVID a dar y ellos nos dieron mucho más a nosotros. Es muy satisfactorio saber que has ayudado a tu comunidad, y haber vivido tantas emociones en momentos delicados. Animo a todo el mundo a hacer voluntariado”, expresó la subdirectora en representación del sentir de todos los participantes.

Y, sin duda, lo más relevante es la satisfacción de pacientes y familiares. Según los formularios cubiertos por las familias, el servicio fue calificado de excelente, no considerando la necesidad de introducir ninguna mejora y con una petición de que las conexiones se realizaran dos veces al día. “Era el objetivo que buscábamos. Cuando mi madre estuvo 14 días ingresada pensé muchas veces que estaría pasando por su cabeza. Las personas mayores no siempre tienen el conocimiento para realizar estas videollamadas, o la enfermedad les impide físicamente realizar el esfuerzo, y necesitan la ayuda de otros”, añade Montse, consciente de que la labor era inabarcable para los ya saturados sanitarios.

Además de agradecer la proyección internacional que ofrece este premio, desde la Cátedra esperan que la visibilidad conseguida sirva para que otros hospitales y universidades desarrollen proyectos similares, y ya adelantan que tienen intención de continuar esta labor de contacto paciente-familiar con otros casos no relacionados con la COVID. Además de a la Cátedra, a la USC y al Hospital de Santiago, agradecen el apoyo del conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, y destacan la importancia de que los futuros médicos y enfermeros desarrollen esta faceta tan humana como complemento a su formación académica.