San Antonio, el ‘encantador’ de leones
En el día de San Antonio muchos amantes de los animales tienen una cita ineludible: la bendición de sus mascotas. En el caso de Compostela es la cofradía Franciscana de la Vera Cruz la que celebrará por segundo año, en colaboración con la comunidad franciscana, la festividad de San Antonio Abad.
Un acontecimiento que se convierte en toda un pasarela de moda, en la que, principalmente los perros lucen sus modelos más atrevidos, con llamativos impermeables, jerseys, collares y correas de paseo y en el que las mascotas aprovechan para hacer amigos perrunos.
Antonio Abad nació en Heracleópolis Magna en Egipto, África, en el año 251 d. C. y murió en el 356 d. C. y fue un monje cristiano, que fundó el movimiento eremítico, es decir, el movimiento de los ermitaños.
Y por lo que parece acabó convirtiéndose en un César Millán de la época, también conocido como El Encantador de Perros, gracias al programa que el mismo presentaba y dirigía, en el que conseguía que los canes más rebeldes cayeran rendidos por completo sus pies.
De este santo se cuenta que a los veinte años de edad San Antonio vendió todas sus posesiones, entregó su dinero a los pobres y que se retiró a vivir a una comunidad local, durmiendo en una cueva sepulcral y teniendo una vida ascética.
El ascetismo es la práctica filosófica o religiosa que se basa en la búsqueda de la purificación del espíritu a través de la negación de los placeres materiales o la abstinencia).
También dedicó su vida a ayudar a otros ermitaños a encaminar su vida espiritual en el desierto. En el texto que hizo san Jerónimo sobre la vida de Pablo el ermitaño se cuenta que Antonio fue a visitarlo en su edad madura y lo dirigió en la vida monástica. Un cuervo que traía diariamente un pan a Pablo recibió al abad trayéndole un trozo a él. Cuando murió Pablo, el ermitaño lo enterró con la ayuda de dos leones y otros animales.
Es por eso que es el patrón de los animales y de los sepultureros.
Por otro lado, también se cuenta que una vez se le acercó una jabalina con sus cachorros que estaban ciegos. La jabalina estaba en actitud de súplica. El asceta curó a los cachorros de su ceguera y desde entonces la madre no se separó de él y le defendió de cualquier alimaña que se acercara.
PROTECCIÓN PARA LAS MASCOTAS. El acto de hoy se organiza para que todos los devotos interesados puedan acudir con sus mascotas y animales domésticos para recibir la bendición en el día que se celebra la festividad del Santo.
Así, se pretende proteger a los animales de cualquier daño que pueda acecharles y para que puedan disfrutar de muchos años de vida junto a sus dueños.
La bendición es a las 19.00 horas al aire libre en el campillo de San Francisco, respetando las normas sanitarias vigentes debidas a la pandemia Covid-19. A las ocho de la tarde tendrá lugar la eucaristía en el interior de la iglesia.