Santiago forma a 109 MIR en Atención Primaria y todos disponen de plaza

Los 109 residentes de Medicina Familiar y Comunitaria -entre médicos de Atención Primaria y Enfermería- con los que cuenta el área sanitaria del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) pueden a fecha de hoy obtener una plaza en el Sergas en cuanto finalicen su período de formación.

De hecho, y según explica a este periódico el jefe de estudios de la unidad docente multidisciplinar de Medicina Familiar y Comunitaria del área sanitaria, el doctor Sergio Cinza Sanjurjo, “a los que finalizarán en mayo se les acaban de exponer las posibilidades que tienen de quedarse con un contrato, y entrarían ya a trabajar”.

Una opción por la que el también médico de familia en el centro de salud de O Milladoiro asegura que se decanta el 90 % de los residentes, por lo que “estamos muy contentos, y debemos continuar trabajando así para que sigan decidiendo quedarse”, ante la carencia de médicos que existe en la actualidad y el riesgo de que la situación se agrave con las próximas jubilaciones previstas.

Además, el área también tiene la suerte de que todas las plazas que convoca para que se formen en atención primaria los MIR se han cubierto hasta la fecha. Indica que en algunos casos es gente que está interesada en Urgencias o en el 061, pero que la mayoría están interesados por la medicina de familia.

Tutor desde hace nueve años y responsable hace cuatro de una unidad que cuenta con 62 docentes acreditados para Atención Primaria y 12 para Enfermería, reconoce que la formación supone un esfuerzo adicional, puesto que “hay que dirigirles y se sigue con la misma gestión del cupo, hay que atender a los residentes en la consulta, detenerse más en la exploración de los pacientes, que tengo que decir que suelen colaborar muchísimo, y todo ello al final supone una demora en la atención, pero es también algo que deben aprender los MIR, a gestionar ese retraso porque al final todo es un aprendizaje”.

Preguntado por los incentivos para el personal que ejerza como tutor en la formación sanitaria especializada anunciados esta pasada semana por el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, el doctor Sergio Cinza considera que es una buena medida en cuanto a que supone una regulación, “va a organizar mejor la actividad docente especializada y a definir bien las figuras docentes, y habrá gente que se anime porque mejora el reconocimiento de la carrera profesional”.

No obstante, recalca el compromiso mostrado hasta la fecha por sus compañeros en este ámbito, lo que “nos garantiza que haya reposición de tutores y que se haya podido incrementar el número de plazas disponibles en el CHUS, acreditando muchos centros nuevos para la docencia”. Es algo, insiste, “que no obedece al resultado de mi trabajo, sino que tiene que ver con el compromiso de los médicos, que entienden además que es una necesidad formar a nuevos profesionales”.

Y añade además que gracias a esa predisposición de los profesionales sanitarios implicados en la labor docente de los futuros médicos, “el número de residentes por tutor suele ser en torno a cinco, y en el CHUS estamos en dos, pudiendo centrarnos más en cada uno de ellos, con una asistencia y experiencia clínica mejor, y al final todo ello redunda en una mejor calidad de la formación que les estamos ofreciendo”.