Un ‘bypass’ junto al Orbital impedirá que varios núcleos queden aislados

Los trabajos de construcción del enlace Orbital avanzan a buen ritmo y se espera que su puesta en marcha permita aliviar de tráfico el periférico, al hacer posible un acceso directo a A Sionlla y Costa Vella sin pasar por el embudo de la actual rotonda del periférico.

Pero su construcción también planteaba un importante problema para los vecinos de Castro y Reboredo, a los que la construcción de esta infraestructura los dejaba sin unos accesos que ya se habían visto limitados cuando se construyó la autovía de Lavacolla, ahora prolongada hasta Lugo.

Una situación que transmitieron al Concello, concretamente al alcalde, Sánchez Bugallo, y al concejal de Medio Rural, José Manuel Pichel, en una visita que realizaron a la zona, para que se tratase de buscar una solución que les permitiera seguir comunicados no solo por carretera, sino también por las líneas de autobús.

Así se comprometió el Ayuntamiento, y este mismo mes tuvo lugar una reunión con los responsables del Ministerio de Transportes y Movilidad para tratar de encontrar una solución al corte por las obras del itinerario que hasta ahora seguían para llegar a Bando y San Marcos, y acceder así también al transporte urbano.

Tal y como se aprecia en la imagen, el nuevo vial que sustituirá al que discurría por donde ahora está la rotonda, estará situado más al norte, y supondrá una especie de bypass para atravesar la autovía de Santiago a Lavacolla, y apenas supondrá un aumento de unos doscientos cincuenta metros con respecto al itinerario anterior.

Una solución que permitirá la mejora de las conexiones entre la autopista y la autovía, y de los polígonos industriales con ambas, que repercutirá de forma especial en las conexiones de estos últimos, sin olvidar ahora a los vecinos de la zona, para los que esta infraestructura imprescindible para la ciudad se había convertido en una auténtica barrera. Los trabajos se llevarán a cabo en parte por el Ministerio, y en parte por el propio Ayuntamiento.

Mientras tanto, los polígonos industriales continúan esperando que tanto el Orbital como el Orbitaliño se pongan en marcha cuanto antes para solucionar los cada vez más importantes atascos que se producen en la entrada desde el periférico.

Unos problemas que además se vieron agravados porque el acceso se realiza a través de un carril de trenzado, que tanto sirve para que los que acceden de la autovía puedan seguir hacia el polígono del Tambre, como para que los que circulan por el periférico puedan entrar a estas áreas industriales. Así las cosas, el colapso, sobre todo en horas puntas y en las épocas de compras, está prácticamente garantizado.

La actual rotonda de acceso a Costa Vella se diseñó en su momento para dar servicio a Amio, pero acabó convertida en la única entrada para los dos polígonos. Esto provoca constantes retenciones que en ocasiones llegan a formar colas en el propio periférico, con el consiguiente riesgo para la seguridad.

Los problemas de tráfico comenzaron en el momento en que se empezó a ocupar el polígono, lo que hizo necesario suprimir el giro a la izquierda en la primera rotonda, demasiado pequeña para que los camiones de gran tonelaje puedan girar cómodamente en ella, y desplazar este movimiento a la rotonda interior, lo que no ayuda precisamente a dar fluidez a la circulación.

Los dos nuevos enlaces permitirán abrir un nuevo acceso no solo a Costa Vella y A Sionlla, sino conectar también interiormente estos dos polígonos con el del Tambre y, a través de la variante de Aradas, con la carretera de Carballo, aligerando el tráfico en el periférico, y de forma especial en la salida norte de la AP-9 hacia este vial.

Al mismo tiempo, incrementará la competitividad de estas áreas, que pasarán a tener acceso directo con las dos vías de alta capacidad y con el aeropuerto de Lavacolla.

Hay que tener en cuenta que en breve se espera que se inicie la construcción del nuevo centro de tecnologías avanzadas Sionlla Biotech, promovido por el Área Empresarial del Tambre. Supondrá un importante revulsivo en la actividad de unos polígonos que crecen día a día, como se aprecia en el elevado número de licencias de obra y apertura que se solicitan en el Ayuntamiento.

Una de las últimas incorporaciones, precisamente en el polígono de A Sionlla, es la del supermercado Aldi, que ya anuncia su apertura para el próximo tres de noviembre, y que se vendrá a sumar al importante número de empresas que han escogido el área empresarial del norte de la ciudad como sede, como otra de las empresas del sector, Eroski, cuyas obras también están muy avanzadas.

El crecimiento de empresas, puestos de trabajo y clientela hace cada vez más necesario mejorar y diversificar los accesos, pensando también en los numerosos proveedores que acuden a diario.