Una falsa amenaza de bomba obliga a desalojar los edificios judiciales de Santiago

Momentos de confusión y cierta sensación de inseguridad se vivieron (aún se están viviendo) en Santiago tras haber recibido la Comisaría de Policía de la capital gallega un aviso, de sus colegas en Madrid, sobre una llamada alertando de una amenaza de bomba. El comunicante hablaba de juzgados y Compostela y por eso se activaron todos los protocolos. En la comunicación se decía que el artefacto explotaría a una hora que, en estos momentos, ya se superó, según confirmaron a EL CORREO fuentes oficiales.

Lo cierto es que tras analizar la llamada, los expertos policiales en Madrid se inclinaron por trabajar bajo la hipótesis de que se trataba de una comunicación falsa pero dada la tensión vivida estos días con el juicio del Alvia se decidió poner en marcha un dispositivo con los Tedax para barrer las instancias judiciales. Fuentes del TSXG confirmaron que “la Policía Nacional avisó al juez decano de Santiago de la Compostela de la existencia de una llamada con una amenaza de bomba. El decano tomó inmediatamente la decisión de desalojar los dos edificios judiciales de Santiago hasta que los Tedax inspeccione ambos inmuebles”. “ La zona de la Cidade da Cultura habilitada para el juicio del Alvia también está siendo inspeccionada, al considerarse ahora mimo sede judicial”, añadieron las fuentes.

Sobre las 16.00 horas en la gerencia de la Cidade da Cultura se recibió idéntica comunicación pidiendo que se procediera adesalojar los edificios y el resto de espacios. Al ser viernes ya había menos trabajadores de los habituales pero los agentes se encontraron con un problema añadido: en el Gaiás estaban los vacunódromos que también fueron desalojados. Al mismo tiempo se estableció un perímetro de seguridad para impedir el acceso a la Cidade da Cultura de nuevos ciudadanos, ya fueran personas citadas para inmunizarse o visitantes