De las cerezas se aprovecha todo
Cada vez que veo cerezas en la frutería, es inevitable que mi mente me traslade a mis 8 años cuando en casa de la abuela hacíamos el ritual de las cerezas.
Cada día, acompañaba a mi madre a recoger las cerezas. Ella se subía a la escalera de madera y me las daba, y yo las depositaba en un recipiente.
Ya en la mesa, saboreaba las deliciosas cerezas y sabía que debía reservar los palitos y los huesos en los correspondientes botecitos que mi abuela ponía en la mesa.
Los palitos se ponían al sol a secar. Después se reservaban para preparar infusiones. Son ideales cuando hay retención de líquidos. Se pueden mezclar con cola de caballo en la misma cantidad y tomar varias veces al día.
En cuanto a los huesos hay que hervirlos en agua con un chorrito de vinagre, se escurren y se ponen a secar. Cuando estén bien secos se pueden preparar los saquitos de huesos de cerezas, un remedio que se conoce desde la época de los persas y que se puede utilizar tanto como compresa caliente o compresa fría.
El hueso de la cereza tiene propiedades interesantes como la de conservar el calor y el frío y también la de absorber la humedad del cuerpo, evitando la sudoración.
Necesitaremos telas de algodón, huesos de cereza y hierbas aromáticas como la lavanda... Se prepara un saquito pequeño con las hierbas que introduciremos en el saco grande antes de rellenar de huesos. Se cierra la bolsa y está lista para ser utilizada.
Si lo vas a utilizar caliente, lo puedes calentar en el microondas no más de 3 minutos y vas probando hasta encontrar la temperatura adecuada. Y si lo necesitas para aportar frío, mete el saquito en una bolsa de congelados y al congelador.
El saquito de calor es adecuado para la lumbalgia, contractura cervical, dolor de espalda, dolor menstrual, para calentar los pies o la cama en invierno e incluso para relajarnos.
El saquito frío puede ser útil en algunos dolores de cabeza, en golpes, calambres etc.
Beneficios y propiedades de las cerezas
Fuente de fibra, con ligero efecto laxante.
Rica en antioxidantes que protegen el corazón, favorece la circulación y ayuda a bajar la tensión arterial. Aptas para diabéticos por bajo contenido glucémico.
Fuente de minerales y vitaminas: calcio, magnesio y vitamina A, C y E.
Ayudan a prevenir la pérdida de memoria.
Antiinflamatorio.
Recuperación muscular después del deporte.
Fuente de melatonina que ayuda a regular los ciclos del sueño. Tomar zumo de cereza 30 minutos antes de dormir.
Si te preocupa tu alimentación y quieres comentarme tu caso, puedes escribirme a consulta@otiliaquireza.com.