Santiago
+15° C
Actualizado
sábado, 10 febrero 2024
18:07
h

José Antonio Ramos Sucre: prosas poéticas

la pérdida del breve volumen de prosas poéticas que eran el total de lo escrito por el brillante pero apenas conocido escritor venezolano José Antonio Ramos Sucre (1890–1930), se me ha visto compensada por la aparición de una oportuna y suficiente antología, Insomnio (Ed. Firmamento, 2021), a la que pone ajustado y ceñido prólogo Juan Bonilla, quien insiste en “La experiencia extrema del insomnio” a base del psicofármaco veronal como causa determinante del suicidio del escritor que residía en Ginebra, donde, igual que en Caracas, daba largos paseos nocturnos para que lo venciera un sueño que lo tuvo en más de una ocasión al borde de la locura, gravemente insomne, y acabó secando su propia obra.

Era Ramos Sucre un hombre de sólida y amplia cultura, periodista, abogado y diplomático, impenitente solitario, agobiado por el carácter de su madre y por los trágicos tiempos de la dictadura de Juan Vicente Gómez. Coetáneo de las vanguardias, su obra no se vincula estrictamente a ellas, y así, se conecta con la de quienes van por libre en su quehacer creativo, plasmado siempre en poemas en prosa escritos en primera persona formalmente autobiográfica y de esa condición en el plano del cosmos lírico. El sueño, su búsqueda inútil, es otra constante –trágica, angustiosa– de sus extraños escritos, que lo son una y otra vez en clave onírica.

Como escritor de raíces románticas se hunde en la noche y en los cementerios, en el amor y la muerte, en el aislamiento y en el tenebroso mar. Hay un fondo amenazante en una realidad que le resulta hostil y dolorosa a su “lastimado espíritu” (p. 26), a su “juventud transcurrida sin goces” (p.23).

Funebrismo, tenebrismo, desconsuelo y destino fatal son otros tantos elementos del naufragio del “yo lírico” que aquí se retrata y autoanaliza, perdido entre sueños por fantásticas geografías, terrores y amenazas. Irracionalismo, onirismo y fantasía se mantienen como líneas maestras de un espíritu enfermo acosado por obsesiones, sombras y una insoportable carga de nihilismo que lleva al acabamiento y la autodestrucción. Toda una serie de escenas teñidas de un estremecedor visionarismo confieren implacable espesor a las imágenes y otros recursos líricos de estos alucinantes y estremecedores escritos que llegan vivamente al lector, aunque tengan que rodear por momentos el conocimiento lógico.

Insomnio es literatura de esmerada construcción estética, de sombría expresividad y de proseguida síntesis de los elementos que conforman la naturaleza humana, tantas veces en constante y contraria tensión.

05 nov 2021 / 01:00
  • Ver comentarios
Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
TEMAS
Tema marcado como favorito
Selecciona los que más te interesen y verás todas las noticias relacionadas con ellos en Mi Correo Gallego.