Manuel Colmeiro: los murales de las Galerías Pacífico
El edificio y los murales de las Galerías Pacífico de Buenos Aires, son Monumento Histórico Nacional, desde 1989 y el pintor Manuel Colmeiro (1901-1999) autor de uno de ellos, recibió el encargo de realización, al formar parte del Taller de Arte Mural, junto a los artistas Lino Enea Spilimbergo, Antonio Berni, Demetrio Urruchúa, y Juan Carlos Castagnino.
La petición parte de los arquitectos Héctor Ezcurra y Jorge Aslan, quienes regentaban en la década de los cuarenta uno de los estudios mas activos y prestigiosos de la ciudad. Los murales ya están finalizados en 1946 y ocupan los 450m2 de la cúpula central, partir de cuatro bóvedas confluyentes. El inmueble comprende toda una manzana flanqueda por las calles Florida, Viamonte, San Martin y Avda de Córdoba y en aquellos momentos, albergaba en los bajos, una selección de exclusivas tiendas, a modo de inspiración de las galerias comerciales europeas, de París y Milan y la primera planta se dedicó a oficinas.
Con anterioridad, el edificio había tenido otros usos; a finales del siglo XIX y principios del XX fue sede del Museo de Bellas Artes y de la Academia de Bellas Artes; en 1908 lo adquiere la Compañia Ferrocarril de Buenos Aires y del Pacífico, de ahí el nombre definitivo.
Un precedente para los artistas del Taller de Arte Mural, creado en 1944, fue la obra de David Alfaro Siqueiros, Ejercicio Plástico (1933), quien expulsado de México y Uruguay, había llegado a la capital bonaerense invitado por la Asociación de Amigos del Arte, a instancias del escritor Waldo Frank, con el propósito de impartir una serie de conferencias sobre su obra y experiencia como muralista. Su presencia entre los artistas argentinos fue motivadora; en el tiempo de permanencia en Buenos Aires, recibe el soporte y la protección del director del diario Crítica Natalio Botana y en agradecimiento, Siqueiros ideará para los sotanos de su residencia, Quinta Los Granados, en Don Torcuato, un ambicioso y experimental mural, enfocado en la narración poética y en la exaltación legendaria, siendo el tema principal el mundo submarino; de marcado carácter escénico y extensión, ocupaba todo un espacio abovedado que incluía las paredes, y para la realización de Ejercicio Plástico, Siqueiros contó con la cooperación de Berni, Spilimbergo y Castagnino.
En cuanto al proyecto mural de las Galerías Pacífico, como primera medida, los artistas proponen que el trabajo se realice en equipo y parten de una serie de pautas y principios conjuntos para la intervención. Se trata, al tiempo, de disponer de una obra que permita expresar la filosofía de cada autor, y de manifestar en ella las respectivas sensibilidades , y de este modo, desde lo particular, crear una obra colectiva, de carácter narrativo, en la que elementos clásicos y mitológicos provoquen en el público afinidades y sensaciones de reencuentro con las historias representadas, dentro de una atmosfera de evocación y ensoñación
A partir de una temática que destaca alegoricamente cualidades humanas : el amor, la solidaridad, la relación con la naturaleza, los murales se han de sustentar en 12 paneles que mantendrán una estudiada coherencia y unidad en cuanto a líneas, formas, luz y color para integrarse con armonía en el conjunto arquitectónico; las pinturas desarrolladas por cada artista se ajustan en torno a un concreto argumento. El amor: Antonio Berni. La vida doméstica: Castagnino. El dominio de las fuerzas: Spilimbergo. La fraternidad: Demetrio Urrúchua. La pareja humana: Manuel Colmeiro.