Protegerse de las estafas en línea al comprar por Internet

El auge de la realización de todo tipo de compras a través de Internet, tendencia que se ha visto aún más incrementada con motivo de la pandemia de la covid-19, ha traído consigo un consiguiente aumento de los intentos de estafas o fraudes en línea, actividades ilícitas que se pueden evitar tomando ciertas medidas.

En este sentido, las estafas más extendidas en los últimos tiempos son los denominados “phishing” o suplantación de identidad, una técnica que busca redirigir a las personas a webs fraudulentas que tienen una apariencia similar (logotipos, enlace...) a otras oficiales. Por ello, se debe eliminar cualquier correo electrónico o mensaje que se reciba y que pueda parecer sospechoso, sin abrirlo. Además, se deben evitar las cadenas de mensajes, ya que son fuente de correo basura y un modo de recopilación de direcciones mail; y también se recomienda tener instalado en el ordenador, teléfono móvil o Tablet un antivirus actualizado y seguro, que bloquee este tipo de contenidos, así como contar con las últimas versiones del software de los programas.

Se debe recordar que llevar a cabo las compras por Internet es seguro, rápido y sencillo, pero para ello hay que cumplir unas mínimas normas de seguridad. De este modo, para asegurar la privacidad en línea y proteger datos sensibles, son muy comunes las VPN o red privada virtual, un servicio, como el que ofrece Surfshark VPN, que permite conectarse a Internet a través de un túnel cifrado, usualmente empleado para proteger conexiones a puntos de acceso público a la red wifi, ocultar direcciones IP y hacer que la navegación sea privada.

Asimismo, el cliente debe realizar un examen de la tienda online o comercio electrónico antes de realizar una compra, asegurándose de que se trata de un comercio real y de confianza antes de aportar los datos bancarios. Para ello, se puede comprobar la información sobre la empresa responsable de la página web o comprobar los comentarios y valoraciones de otros clientes. Para sea un comercio seguro, el sitio web debe empezar por https y candado en la barra de direcciones.

Del mismo modo, y en línea con lo citado anteriormente de la VPN, hay que tratar de evitar las redes de conexión públicas o sin proteger con contraseña para realizar una operación, ya que los ciberdelincuentes pueden acceder con mayor facilidad.

También se debe huir de los precios desorbitadamente bajos con relación al mercado, ya que pueden esconder una estafa o fraude; desconfiar de propuestas de negocios que suenen demasiado bien para ser ciertas o comprobar que las ofertas incluyen impuestos y no presentan gastos adicionales ocultos. Asimismo, ante igualdad de ofertas, se recomienda apostar por las webs españolas o localizadas en la Unión Europea.

A mayores, se debe intentar que el pago siempre sea contra reembolso, desechando los envíos de remesas de dinero a determinada dirección y sin facilitar datos de cuentas bancarias o los pagos por adelantado. Entre los métodos seguros, se recomiendan las transferencias bancarias, que permite seguir el rastro del dinero, las tarjetas de crédito o por Pay Pal.

Por último, es de vital importancia, sobre todo de cara a posibles reclamaciones, descargar y guardar en lugar seguro todas las facturas y recibos que la empresa remita, ya que sirve de garantía en caso de problemas.