Simón

Hace un tiempo le dedicamos un espacio a este periodista y escritor llamado Pedro Simón. Fuimos, entonces, muy elogiosos con él. Se le otorgaba en aquella ocasión el Premio Primavera de Novela 2021 gracias a Los ingratos. Y hacíamos una valoración precisa de lo que significaba en nuestro mundo ejercer a la par esos dos oficios teóricamente tan diversos, aunque, a la hora de la verdad, el hecho de estar cotidianamente en contacto con el mundo real y sus innumerables problemas, ayuda no poco a crear y sostener un discurso enormemente rico y lleno de matices en ese universo narrativo. Pensábamos en el papel que había jugado alguien como Tom Wolfe en medios como Rolling Stone y cómo había llegado a convertir crónicas de la sociedad más actual en obras maestras de la literatura de nuestros días. EL Nuevo Periodismo, decíamos todos. Y de eso se trataba, ni más ni menos. Salieron, en todos aquellos años, historias perfectas e insustituibles, como el famoso A sangre fría de Truman Capote, donde la gloria de las letras nacía, ni más ni menos, que en las páginas de sucesos. Y recurríamos a otro maestro, Alejo Carpentier, para aclarar un poco más todo. Él decía que una cosa y la otra eran las dos caras de la misma moneda, y que la única diferencia entre las dos era que en el periodismo se jugaba con materia del presente y en la novela, con el pasado...

LOS INCOMPRENDIDOS. Simón trabaja en El Mundo. Su nivel sobrenatural en el ejercicio de su oficio, le ha llevado a conquistar cimas como la que consiguió en 2015. Cimas sagradas como el Ortega y Gasset, uno de los premios más prestigiosos del planeta. Pues bien. El caso es que acaba de editar ahora mismo, en Espasa, como de costumbre, una nueva novela que lleva por título Los incomprendidos. Sigue jugando con la materia de siempre. Es la realidad más perfectamente reconocible. Gente normal, con medios de sustento normales, con problemas cotidianos normales. Todo eso, claro está, en apariencia. Vean. Los protagonistas son Javier, socio de una editorial en calidad de lector (que está analizando la viabilidad de lo que parece ser algo así como la gran esperanza blanca del thriller hispano) y su mujer Celia, una neumóloga muy eficiente de un hospital. Sus hijos: uno pequeño y una preadolescente. Viven en un popular barrio madrileño, en una casa minúscula. Pero están empezando a avergonzarse de su status, al compararse con sus amigos, y deciden mudarse a un enclave la mar de pijo de las afueras. Hasta ahí, todo perfecto. Pero una excursión (accidente gravísimo de por medio) a los Pirineos lo cambia absolutamente todo. Y nace la soledad. Y la incomunicación. Y salen a relucir secretos muy molestos...