Santiago
+15° C
Actualizado
sábado, 10 febrero 2024
18:07
h
A los pies de la duna de Corrubedo se encuentra la Grip Surf School, a cuyas clases acuden incluso grupos que regalan la experiencia en las despedidas de soltería TEXTO Suso Souto

Meditando con yoga y peinando las olas en la playa de A Ladeira

Póngase un bañador, coja una toalla, unas chancletas y crema solar y prepárese para enfundarse en un traje de neopreno, porque hoy toca surfear... y meditar. Y lo haremos en una playa de las que se merecen el manido título de paradisíaca: la de A Ladeira, en Corrubedo (Ribeira).

Cuando el bilbaíno Alex Sebastián conoció esta zona en el año 2013, tras llegar a la comarca barbanzana por razones de trabajo, pronto entabló amistades en la zona, con los ojos puestos en el arenal que acaricia las dunas de Corrubedo.

De modo que hace cinco años decidió abrir allí una escuela de surf para todas las edades y niveles que, en realidad, como verán, es mucho más que eso y se ha convertido en un auténtico reclamo turístico.

Se llama Grip Surf School y, aunque se imparten clases desde 2015, lo cierto es que sus monitores (el equipo lo forman seis) tienen más de veinte años de experiencia en esta disciplina de deporte acuático.

Los cursos se imparten tanto en verano como en invierno, pues el centro está abierto todo el año.

“No sólo te enseñamos a ponerte de pie en la tabla; con nosotros aprenderás, por ejemplo, a coger las olas hacia los lados, a reconocer la zona de rompiente, a identificar las corrientes, a hacer el pato y muchas cosas más”, señala Alex.

Es una escuela oficial de la Federación Gallega de Surf, tiene los permisos necesarios de Costas del Estado para poder ocupar el dominio público marítimo y dispone de seguro de accidentes y de responsabilidad civil. Además, sus monitores disponen de la titulación TD1.

Las clases duran dos horas; empiezan en el momento del reparto del material y se dividen en quince minutos de teoría, otros diez de calentamientos y entre una hora y una hora y media en el agua.

En los grupos de iniciación, la ratio es de cinco o seis alumnos por monitor; en los de perfeccionamiento son tres por monitor; y los grupos de baby-surf son para cuatro o cinco alumnos. En verano hay clases todos los días, de lunes a domingo, con turno de mañana, de 11.00 a 13.00, y de tarde, de 16.00 a 18.00.

CUATRO ARENALES. Siempre buscan las mejores condiciones de mar y viento, dependiendo del nivel que tenga el grupo. Las clases pueden ser en la playa de O Vilar para días de poco mar; en la de A Ladeira para días de mar intermedio; en la de Espiñeirido para los de muy pocas olas; o en la de Aguiera para los de temporal y mucho mar.

Por cierto: el perfil de los grupos que acude a este centro es de lo más variado, porque acuden desde colegios, como actividad de excursión de fin de curso, desde asociaciones, clubes deportivos e incluso como regalo de primera comunión o de cumpleaños... y hasta como sorpresa para los protagonistas de las despedidas de soltero y de soltera.

Además, los clientes tienen la oportunidad de alquilar desde las tablas de surf hasta los neoprenos, las paddle surf o los kayak. De todos modos, “si tienes tu material, lo puedes traer a la clase y los monitores te asesoran en todo momento si es el adecuado para tu nivel y condiciones de mar”, comenta.

Pero en este centro hay también lugar para el activismo ecológico. La limpieza de la playa de Corrubedo es alguna de las actividades que realizan desde esta escuela, con la colaboración del club H2O.

“Creemos algo indispensable concienciar a todos los pequeños y mayores de la importancia del cuidado del medio ambiente, y más aún de una reserva como la de las dunas de Corrubedo”, añade Alex.

RETIRADAS DE BASURA. Realizan dos limpiezas al año de los arenales de la zona; normalmente en las de A Ladeira y Balieiros. El Concello de Ribeira colaboró con la logística: la cesión de los contenedores de basura y reciclaje. La última de estas iniciativas la llevaron a cabo en la pasada primavera, y la próxima será en el mes de septiembre.

En el centro existe además un chiringuito, que no sólo es punto de encuentro para socializar las jornadas, sino también un lugar en el que poder desayunar, comer o cenar a pie de playa: raciones de calamares, pulpo, pimientos... También preparan pizzas, bocadillos... y cócteles.

Pero si hay algo que llama la atención de quienes disfrutan de la playa de A Ladeira es la celebración de clases de yoga en la arena, que también imparte la Grip Surf School.

La profesora es Carolina y se celebran tres días a la semana, a partir de las ocho de la tarde. Duran una hora y cuestan ocho euros.

INICIATIVA SOLIDARIA. La otra cuestión destacable es la faceta solidaria de este negocio, pues tres veces al año se ofrecen clases de surf totalmente gratuitas a los usuarios y usuarias de la asociación de personas con discapacidad intelectual Amicos del Barbanza.

Y todo esto ocurre en un entorno medioambiental que constituye un auténtico tesoro para Galicia: el parque natural de Corrubedo. Un lugar en el que se impone la visita a la duna y también al faro, que, por cierto, está en obras para su explotación como hotel y restaurante.

También en la localidad corrubedana, concretamente en su puerto, será pronto noticia la inauguración del restaurante que promueve un incondicional veraneante en esta zona: el prestigioso arquitecto británico David Chipperfield.

Una curiosidad: la escultura de Gormley regalada por Chipperfield a Corrubedo y que preside la playa de As Furnas se llama Grip.

27 jul 2020 / 00:01
  • Ver comentarios
Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
Tema marcado como favorito