Carrera contrarreloj de la UE para evitar la variante ómicron

La variante ómicron del coronavirus ya comenzó este fin de semana a extenderse por países europeos. Bélgica, se convirtió el viernes en el primer país de la zona en detectar la presencia de casos de esta variante. En concreto, se registró un positivo en una persona no vacunada que volvía de Egipto vía Turquía.

Pero este no fue el único país en dar la voz de alarma. El Reino Unido avisó el sábado de otros dos casos en el país. En este caso, se trata de dos personas conectadas entre sí, una es de Nottingham y otra de Chelursfard, a las que se les están investigando sus contactos. A pesar de que a últimas horas del domingo se confirmó un tercer caso sin aparente relación.

También el sábado, en Alemania, el estado de Baviera anunció sus dos primeras infecciones. En este caso, el contacto se habría producido el miércoles pasado, antes de que la Unión Europea interrumpiese los vuelos con el sur de África.

Sin embargo, más países se sumaron este domingo a la lista de casos con la variante ómicron. Los Países Bajos confirmaron este domingo al menos 13 casos de la nueva variante, el mayor número confirmado hasta el momento en la UE. Actualmente, están buscando a unos 5.000 viajeros que llegaron en vuelos del sur de África el pasado lunes, con la intención de someterlos a un test de coronavirus.

Los países europeos que hasta este domingo identificaron casos con la variante ómicron son: Alemania (2), Italia (1), Bélgica (1), Australia (2), Israel (1), Reino Unido (3), Dinamarca (2), aunque nunca tantos como los confirmados en Países Bajos y fuera del sur de África ya que, a últimas horas del domingo, se confirmaron un total de 19 casos registrados en Botsuana y desde su Gobierno insisten en que son “casos importados”.

Por su parte, Marruecos suspenderá a partir de la medianoche del lunes y durante dos semanas todos los vuelos procedentes del extranjero para protegerse de la variante ómicron del coronavirus.

IRSAEL cierra fronteras. Israel se convirtió esta pasada medianoche en el primer país del mundo en cerrar sus fronteras por completo a los extranjeros para prevenir la expansión de la variante ómicron de covid-19, además de imponer cuarentena obligatoria para los ciudadanos israelíes que regresen al país y otras restricciones internas.

Israel confirmó de momento un contagio con ómicron -una mujer israelí que regresó la semana pasada de Malawi- y tiene otros doce sospechosos a la espera de ser verificados, también viajeros procedentes de África.

Esta “estricta” medida, que estará en vigor durante dos semanas a la espera del desarrollo de la nueva variante, pdijo hoy el primer ministro, Naftali Benet.