La hostelería de Santiago ya tiene a sus distribuidores al cien por cien

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La hostelería santiaguesa goza de una merecida fama ganada con profesionalidad y buen hacer tanto detrás de la barra como en cocina o con el servicio en mesa. Y aunque los trabajadores del sector tienen mucho que ver en este éxito no hay que olvidarse del engranaje que se pone en marcha con cada pedido. Los distribuidores ponen a disposición de restaurantes y bares una amplia gama de productos, muchos de ellos de una alta calidad. Juega un papel muy importante la plaza de abastos compostelana, que no solo es visitada por turistas, ya que los mejores cocineros saben que acudir a los establecimientos del mercado es garantía de éxito porque tienen a su alcance numerosos artículos frescos que saben que harán las delicias de cualquier paladar. Pero además cuentan con empresas de reconocido prestigio que le sirven tanto el pan como la repostería, las carnes y los pescados, las frutas y las verduras, los vinos y las cervezas, cualquier otro tipo de bebida y hasta embutidos, quesos o fiambres. Y es que en la capital gallega se abre un amplio abanico de posibilidades con una despensa que es la envidia de los grandes chefs cuando visitan la ciudad. Una vez puesta en marcha la hostelería con todas las garantías sanitarias, llega el turno de los proveedores para ocupar los huecos que quedan en neveras y estantes tras el consumo de los clientes. Ellos también son parte de la grandeza del sector.