Muere un niño de Carballo tras caer al agua en el embalse de A Fervenza

Tenía once años y disfrutaba de una jornada de ocio con sus compañeros del CEIP Fogar // Había participado en una actividad de kayak // Está abierta una investigación para esclarecer los hechos
Sucesos
JOSÉ M. RAMOSCarballo
El 061 movilizó un helicóptero hasta el embalse de A Fervenza. Foto: Helico Santiago

Consternación e impotencia. Ese es el sentir en Costa da Morte y, especialmente, en la capital de Bergantiños, tras conocerse el trágico fallecimiento de Carlos, un niño de 11 años, alumno de sexto de Primaria del CEIP Fogar, de Carballo, cuando disfrutaba de una jornada de ocio en el embalse de A Fervenza, en Mazaricos, en compañía de otros treinta y nueve compañeros. Sucedió a media mañana, después de que los escolares participasen en una travesía en kayak impartida por monitores de la empresa de turismo activo Naturmaz.

Según señalaron, los pequeños ya habían concluido la actividad y estaban en tierra, disfrutando de un baño a orillas del propio embalse, en una zona en la que, según fuentes de la empresa, “es un remanso, donde no hay corrientes” y en la que el baño está permitido. Por causas que se desconocen, y que se están investigando, el pequeño cayó al agua y en un primer momento no conseguían localizarlo, según informó al respecto la Guardia Civil.

El 112 recibió el aviso alertando de la desaparición del menor a las 12.30 horas, a través de la llamada de un particular que solicitó ayuda para tratar de localizar al niño.

Los operadores del Centro Integrado de Atención ás Emerxencias de Galicia (CIAE) 112 Galicia alertaron a los servicios sanitarios, que movilizaron hasta el lugar un helicóptero medicalizado del 061 con base en Santiago de Compostela. Asimismo, también fueron movilizados efectivos de Salvamento Marítimo, el Servizo de Gardacostas de Galicia, la Guardia Civil, los Bomberos de Santa Comba, el GES de Muros y miembros de la agrupación de Protección Civil de Mazaricos.

Poco después, el 112 recibía otra llamada confirmando que ya se había localizado y rescatado el cuerpo del menor que, desafortunadamente, y a pesar de los esfuerzos realizados por los equipos sanitarios, que intentaron reanimarle, nada pudieron hacer por salvarle la vida.

Fuentes de la Guardia Civil señalaron que, por el momento, se desconoce cómo pudieron haber sucedido los hechos. La Policía Judicial se encarga de la investigación que permita esclarecer las circunstancias en las que se produjo el fatal suceso en el que perdió la vida el pequeño.

Algunas fuentes apuntan a la posibilidad de que en el entorno donde los niños se estaban bañando hubiese un pozo, al cual cayó el niño y en el que quedó atrapado, motivo por el cual no pudo ser rescatado hasta que fue localizado el cuerpo, si biens será la investigación judicial la que determine lo sucedido.

Al parecer, distintos grupos de escolares del CEIP Fogar de Carballo venían participando desde hace unas semanas en actividades de ocio activo en el entorno de A Fervenza, enmarcadas en las tradicionales excursiones de final de curso que suelen organizar anualmente los distintos centros educativos.

En función de las edades, se programaban actividades adaptadas a cada grupo, si bien todos ellos participaban en las travesías con kayak por el embalse. En las notas que se les enviaban a los padres se les pedía que sus hijos llevasen ropa de baño.

Según informaron algunos padres con escolares matriculados en dicho centro, este martes se desplazaron al embalse de A Fervenza los alumnos de dos cursos de sexto de Primaria, acompañados del director del colegio y, al menos, de otro docente. Después, se desplazaron al lugar también otros directivos del centro educativo para acompañar en el regreso a los niños y niñas cuya jornada de disfrute acabó en tragedia.

Cabe señalar, además, que el centro de ocio Naturmaz está en funcionamiento desde hace bastantes años, y tanto los centros educativos como los concellos de la zona programan habitualmente actividades para los niños y niñas, especialmente durante la época de verano.

La noticia se difundió pronto por la zona, causando una fuerte conmoción entre los vecinos y vecinas de Carballo, que lamentaban la fatídica pérdida del pequeño, que vivía en las proximidades del barrio carballés conocido como A Ponte da Pedra.

Al poco de conocerse lo sucedido, el Concello de Carballo, a través de sus redes sociales, expresó sus condolencias mostrando la consternación “pola nova do falecemento dun escolar carballés”, indicando que “no nome de toda a Corporación queremos facer chegar as condolencias e a solidariedade do pobo de Carballo coa familia do neno, aínda sabendo que non hai consolo posible”.

Algunos padres y madres de escolares compañeros del fallecido expresaron también su sensación de “impotencia” ante un hecho al que todavía no le encuentran explicación. Muchos lo atribuyen al fatal destino, conscientes, aseguran, de que “esto podería pasarnos a calquera de nós”.

Lamentan que una jornada que debería ser de diversión y disfrute para todos los niños y niñas, como recompensa al esfuerzo realizado a lo largo de todo el curso, acabase de esta manera. Desde todos los rincones de Costa da Morte se sucedieron también las condolencias a través de las redes sociales y los mensajes de ánimo a la familia.