Dzanan Musa, gran amenaza del Breo ante el Obradoiro

El Monbus precisa el próximo sábado de un triunfo para despegarse de la zona de descenso
Baloncesto
Mariano Raskin
LIGA ENDESA ACB. El alero bosnio Dzanan Musa, gran figura del Rio Breogán, celebra un triunfo. Foto: ACB Photo (C. Castro)

Llega el sábado (18:00 h.) el derbi gallego de la ACB con mucho en juego para ambos contendientes. El Monbus Obradoiro precsia el triunfo para despegarse de la zona de descenso mientras que el conjunto preparado por Veljko Mrsic vigila de cerca la oportunidad de asaltar los puestos que permiten jugar el playoff por el título.

La condición de recién ascendido que sorprende con su juego y sus resultados ya ha quedado atrás en la percepción del próximo rival del Monbus Obradoiro. Ha tenido mucho que ver la presencia del alero bosnio Dzanan Musa. Alrededor de su figura, el Rio Breogán desarrolla su juego. A medida que ha ido pasando la temporada ha asumido mayor protagonismo en el equipo y los logros de la escuadra lucense van parejos a su consagración como uno de los referentes del campeonato liguero.

Frenarle parece, a primera vista, la fórmula para que el Monbus Obradoiro aspire a una victoria fundamental en su carrera por la permanencia en la liga ACB. Bajar su contacto con el balón podría ser la primera premisa, aunque no la única. Musa es el cromo brillante, pero en la teoría de la manta corta, taparle puede suponer dejar los pies al aire, o en este caso, demasiada libertad a Trae Bell-Haynes y Rasid Mahalbasic. Son las otras dos patas importantes sobre las que se sustenta la condición de equipo revelación, que ha llevado al Breogán a jugar la Copa del Rey y a poner en aprietos a todo un Real Madrid en Granada. En la retina queda el 100-83 que endosó el conjunto compostelano en el Multiusos Fontes do Sar en el encuentro de la primera vuelta. Por entonces, el conjunto lucense buscaba cerrar de forma matemática el pasaporte para la cita copera, pero el equipo de Moncho Fernández no le dio opción.

Brilló aquel día Laurynas Birutis, que jugó casi 35 minutos y que pudo con todos los rivales que se le opusieron en la zona. Con 26 puntos, ocho rebotes y ocho faltas recibidas, no encontró respuesta en la pintura. Su par, por posición y en importancia en la plantilla, el esloveno Rasid Mahalbasic, encontró dificultades para pararle y para conseguir sumar. Se quedó en seis puntos.

De hecho, el único hombre grande que hizo daño fue el ala-pívot Marko Lukovic. El jugador serbio, de buena mano en rango de larga distancia, consiguió 14 puntos y capturó siete rebotes en el partido jugado en Sar.

Al margen del pívot lituano, Kassius Robertson estuvo contundente en sus penetraciones y en la media distancia en las filas anfitrionas. Aunque desacertado desde el perímetro, logró 21 puntos, repartió seis asistencias y recibió siete faltas.

El funcionamiento coral del Monbus Obradoiro se completó con la anotación por encima de los diez puntos de Thomas Scrubb, Braydon Hobbs y Henry Ellenson. En esa tarde de invierno, el Rio Breogán que visitó el Multiusos llegaba, además, convulsionado por la situación en el banquillo. Era muy reciente la marcha de Paco Olmos al San Pablo Burgos, Javi Muñoz, su sustituto, había dado positivo en COVID-19 y Veljko Mrsic, que acababa de llegar a España y debería debutar en el derbi, se tuvo que confinar nada más bajar del avión. Oriol Comas cogió las riendas del conjunto lucense para ese encuentro.

Desde entonces, el Rio Breogán ganó solo dos partidos y perdió cuatro, pero la piedra angular del proyecto del cuadro lucense, Dzanan Musa, tomó por costumbre el convertirse en hombre clave. Anotó 31 puntos en el triunfo ante el Valencia (99-82) y 21 en la victoria ante el Andorra (79-86). Desde el encuentro ante el BAXI Manresa, el 14 de noviembre, ha conseguido dobles dígitos en anotación (13 partidos seguidos) y solo en el último compromiso -derrota 89-84 ante el Bitci Baskonia- no visitó la línea de tiros libres. Moncho Fernández, en la previa del partido ante Unicaja, había dado por buena, de forma irónica, una alta anotación de Darío Brizuela a cambio de un triunfo de su equipo. Repetir la fórmula con Musa en el Pazo de los Deportes de Lugo se antoja arriesgada.

El equipo lucense se pone al día en Murcia. El Rio Breogán visita esta noche, a las 20:30 h., al UCAM Murcia, en partido correspondiente a la jornada 20, aplazado en su día. Después de tres derrotas en cuatro partidos, el cuadro preparado por Veljko Mrsic buscará recuperar sensaciones e intentar dar otro paso para acercarse a la octava posición. El encuentro cuenta con el aliciente del ánimo de revancha en las filas murcianas después de la tensión vivida en el partido de la primera vuelta, que se llevó el conjunto lucense por 94-89, en un encuentro que duró dos horas y media por fallos en los relojes de posesión y por una tangana que acabó con Sadiel Rojas descalificado.