Épica remontada del Atlético que levanta un 0-2 frente al Valencia

Madrid. Derrotado en el minuto 90, en siete minutos de tiempo añadido el Atlético de Madrid resucitó con dos goles, de Ángel Correa y Mario Hermoso, con los que se impuso este sábado por 3-2 a un Valencia que había rentabilizado a la perfección los errores locales, pero se marchó de vacío por su conformismo.

Tirando de épica, de escudo -vistió con el tradicional debido al 75 aniversario de su denominación actual-, del picante de Ángel Correa y el impulso de su afición, el Atlético salió del agujero en el que había caído por sus propios errores, aprovechados por dos hachazos de Yunus Musah y Hugo Duro en la primera mitad.

Más ambicioso en la segunda, contra un rival atrincherado y dispuesto a dejar el tiempo pasar hasta el final, Cunha, primero, y Correa y Hermoso, después, sacaron al conjunto rojiblanco de una noche fúnebre para dar a sus aficionados una dosis de épica reconfortante en el momento actual del club.

Porque el 3-2 no oculta los problemas de este Atlético. Irreconocible respecto al conjunto que se proclamó campeón hace siete meses: tembloroso en defensa, insulso en el medio, inane en ataque.

Los de Bordalás se fueron apagando, pero guardaron siempre la compostura ante un Atlético de Madrid con más hambre. M.A. Moreno