ALEJANDRO BLANCO Presidente del Comité Olímpico Español (COE)

“Las opciones de medalla nos permiten soñar a lo grande”

Tokio2020
Natalia Arriaga
El ourensano Alejandro Blanco, presidente del COE. Foto: Javier Lizón

El grueso del equipo olímpico español viajó este sábado a Tokio tras escuchar de Alejandro Blanco un mensaje ajeno a toda presión: “Que nadie esté pendiente de los resultados”. Esta prudencia esconde el “optimismo realista” del presidente del Comité Olímpico Español (COE), que asegura que “deporte por deporte, en todos hay chicos y chicas que pueden optar a medalla”.

El ourensano opina que “el equipo puede superar los resultados de Juegos anteriores” (20 medallas en 2004, 19 en 2008, 18 en 2021, 17 en 2016) y en algún momento, “ojalá sea en Tokio”, incluso rebasar los 22 metales de Barcelona 92.

Tras el aplazamiento, ¿qué sensación ha experimentado en la última semana al ver el reloj de la puerta del COE marcar la cuenta atrás?

El ayer ya está. Hemos vivido una situación complicadísima a nivel mundial y ahora esto es como un renacer, un amanecer. Pensar que vamos a reunir a los 10.600 mejores deportistas del mundo... Va a haber una competición extraordinaria, aunque sea sin público. La gente quiere ver deporte, quiere ver a sus ídolos, quiere vida y los Juegos representan más que nunca esa vida.

¿Temió que los Juegos se cancelasen definitivamente?

Nunca. Era la voz del optimismo en los momentos más duros. A través del presidente del COI sabía que era su máximo objetivo, porque anularlos no solo tiene una gran repercusión para los deportistas, también para toda la sociedad. Es el mayor evento que puede organizar un país y renunciar a ello conllevaría muchas cosas negativas. Siempre he defendido que habría Juegos y gracias a Dios los vamos a tener.

¿Le emocionaron esas imágenes de los deportistas olímpicos confinados, entrenando en el pasillo de su casa o en un descampado y casi sin medios?

A veces no sabemos analizar lo que vemos. Pero, en aquellos momentos tan duros, ver a los deportistas, a gente joven, no renunciar a sus sueños y cada uno con los medios que tenía, en algunos casos rudimentarios, ser capaces de entrenar, significa que los sueños no se pueden abandonar. Siempre puedes sacar algo para alimentarlos. Ese es el ejemplo que han dado a la sociedad.

¿Solo las cifras de clasificados son una invitación al optimismo?

Llevamos 321 deportistas. Los cálculos más optimistas se movían entre 300 y 310. Y vamos con nueve equipos, lo que para mí es muy importante. Equipos con posibilidades de ganar. En los tres últimos Juegos estamos en este apartado solo por detrás de Estados Unidos, Australia y España. Francia, que es un gran potencia, lleva seis equipos. Por el número de clasificados y por a calidad de los que llevamos tenemos muchas posibilidades de optar a muchas medallas y diplomas.

Hay un grupo grande de estrellas consolidadas como Craviotto, Belmonte, Valentín..., pero que siguen estando entre la élite.

Estos y otros llegan a los Juegos en un gran momento de forma y con un historia de resultados importantes. Esto les da muchas teóricas posibilidades de obtener medalla. Ojalá la competición les dé lo que se merecen por su trabajo, por su calidad y por la posición que ocupan. En muchos deportes llevamos a los mejores del mundo. Soy realista pero también muy optimista y creo que las posibilidades de medalla nos permiten soñar a lo grande.

¿Confía en que lleguen los podios que faltaron en Río en deportes como el judo o la vela, así como en nuevos deportes como el kárate?

Empezando por la vela, España es una gran potencia. Han clasificado a todos los barcos y va una expedición extraordinaria. Kárate es un deporte por el que todos apostamos, pero llevamos a los dos mejores del mundo, Sandra (Sánchez) y Damián (Quintero). Son dos medalla de esas que dices ‘estas salen’, por lo buenos que son y por su posición de números uno del mundo. En judo llevamos a siete deportistas, pero hablando de Niko (Sherazadishvili) es no solo el número uno de su peso, sino el que más puntos tiene del ránquin mundial. Todo eso me hace ser realista, porque sé cómo son las competiciones, pero también optimista. Varios deportistas que no sacaron medalla en Río ahora llegan muy fuerte. El taekwondo, el golf -no olvidemos que va Jon Rahm-, en atletismo hemos tenido unos estupendos resultados en los últimos campeonatos. Si voy deporte por deporte, en todos hay deportistas, chicos y chicas, que pueden optar a la medalla.

Y para otros, como Alejandro Valverde, será previsiblemente la última oportunidad.

Valverde es un deportista único. Estoy convencido de que va a por la medalla y estoy convencido de que la saca. Ha sido el mejor ciclista del mundo, tiene un talento natural y unas condiciones físicas que solo tienen los elegidos y una mente privilegiada. Es la que le falta porque ya lo tiene todo. Sería un gran éxito.

¿Se puede alcanzar la cifra mágica de las 22 medallas de Barcelona?

No dudo de que sí, el cuándo no lo sabemos. Lo que es muy difícil de Barcelona no son las 22 medallas, sino los 13 oros. La siguiente vez que más hemos sacado han sido siete. Lo importante son los finalistas, los que están entre los ocho mejores del mundo. En los dos últimos Juegos el 60 % de los deportistas vienen entre los ocho mejores del mundo.