SARS-CoV-2

COVID-19
Javier Rosende
Esta imagen realizada con microscopio desvela la presencia de coronavirus (en amarillo), entre varias células humanas (en color azul, rosado y turquesa). El jabón destruye la membrana lípida del virus que, desprovisto de su membrana, queda completamente inactivo, incapaz de penetrar en la membrana celular. Es la primera barrera de lucha contra el virus y uno de los mejores métodos para protegerse de este patógeno. (Fuente, www.nationalgeographic.com)

El Coronavirus SARS-CoV-2 es el causante de la covid-19 y ha provocado la pandemia actual. Es similar a sus primos hermanos, está compuesto por un núcleo de ARN, el material genético del virus, y una membrana de proteínas que lo envuelve. Es uno de los seis tipos de coronavirus que infectan a los humanos, algunos causan el resfriado común y dos causan brotes peligrosos: SARS y MERSEl. Su nombre proviene de las protuberancia que sobresalen de su cobertura en forma de “corona”.

La covid-19 afecta de distintas maneras en función de cada persona. La mayoría de las que se contagian presentan síntomas de intensidad leve o moderada y se recuperan sin necesidad de hospitalización. Se transmite principalmente a través de las gotículas generadas cuando una persona infectada tose, estornuda o espira. Estas gotículas son demasiado pesadas para permanecer suspendidas en el aire y caen rápidamente sobre el suelo o las superficies lo que puede provocar nuevos contagios si una persona, tras tocar una superficie contaminada, se toca los ojos, la nariz o la boca. Los síntomas más habituales son fiebre, tos seca y cansancio.