Algo más de 120 profesores se jubilarán en la USC en tres años

La edad media del personal de la Universidade de Santiago es de 55 años // Los tiempos más duros de la crisis económica dejaron en ‘números rojos’ la plantilla
Universidade de Santiago
Rosa Ríos
La Facultad de Medicina de la USC se ubica en el edificio histórico de San Francisco. Foto: ECG

Las estrecheces por las que tuvieron que pasar las universidades españolas en los años más duros de la crisis económica, en los que el Gobierno no permitió reponer el número de profesores que causaban baja, siendo en ocasiones menos de la mitad, colean todavía en las instituciones académicas, que quedaron en números rojos de docentes.

La Universidade de Santiago de Compostela (USC) se vio obligada también a apretarse el cinturón y a este adelgazamiento de personal se le une ahora otro grave problema, el del envejecimiento de su plantilla, con una edad media muy alta: 55 años.

Es una de las principales preocupaciones del actual equipo de gobierno de la USC desde que tomó posesión y que en marzo de 2019 aprobó el plan plurianual 2019-2022 sobre esta materia.

Y es que las previsiones de jubilación de la institución académica cinco veces centenaria son de unas 126 personas en tres años, del 2021 al 2023. Los cálculos están hechos sobre los docentes que llegan a su edad de retiro forzoso, a los que habría que añadir las bajas voluntarias, fallecimientos o excedencias.

Así, de las 126 jubilaciones que en principio se darán de aquí a tres años, 37 corresponden a 2021, 45 a 2022 y 44 a 2023. En cuanto a categorías, la de catedráticos es la más numerosa –lógico si se tiene en cuenta que suelen ser los de más edad– ya que alcanzan los 69 en el trienio, seguida de los profesores titulares, calculados en 49, y mucho más reducida en los niveles de catedrático de Escuela Universitaria (1), titular de Escuela Universitaria (3) y asimilado a titular de EU (4).

El propio rector de la USC, Antonio López, en enero de 2019, en su discurso con motivo del acto académico por la celebración de Santo Tomás de Aquino, avanzó la presentación de un plan de personal para recuperar el talento perdido, garantizar la proyección del personal que vio interrumpida su carrera por la crisis y renovar y reforzar la plantilla con nuevas plazas. “No va a ser sencillo”, dijo.

ALARMA EN ESPAÑA Pero la USC no es la única que tiene este problema, sino que se extiende a todo el Estado. La edad media de los profesores de las universidades públicas es de 54 años. Los datos indican que entre 2016 y 2023 se van a perder 16.200 docentes. Casi 5.500 de ellos catedráticos y alrededor de 6.300 profesores titulares. El resto hasta llegar a los más de 16.000 lo completan docentes sustitutos, asociados, visitantes o contratados doctores.

Uno de los problemas que trae esta situación es que la investigación se puede ver afectada, ya que las personas de más edad, con más categoría y experiencia, suelen ser los responsables de los grupos, los que más convocatorias de proyectos reciben y los que tienen líneas de investigación más importantes. La USC dispone de jóvenes reconocidos para el relevo generacional, aunque es evidente que no querrá desprenderse de los científicos de más edad reconocidos a nivel mundial.