Economistas limitan el impacto este año en la competitividad gallega

La comunidad se salva de situarse entre las comunidades que se verán más afactadas
Economía
José Calviño
Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas, durante su comparecencia ‘online’. Foto: CGE

En el grupo de comunidades formado por Galicia, Murcia, Extremadura, Castilla-La Mancha, Cantabria y Andalucía se situará entre las que sufran menor pérdida de competitividad por el impacto de la pandemia al finalizar este año, mientras otras cinco autonomías, Baleares, Cataluña, Canarias, Navarra y el País Vasco sufrirán los peores efectos, según un análisis del Consejo General de Economistas.

La pérdida será elevada también en La Rioja, Madrid, Aragón, la Comunidad Valenciana, Castilla y León y Asturias. Lo detalla el Informe de la Competitividad Regional en España 2020, en el que se describe un mapa de la situación de cada comunidad para hacer frente a la COVID y que señala que en 2019 había crecido en un promedio del 3,2 % respecto a 2018. Galicia culminó el pasado ejercicio lejos de las zonas más dinámicas, en un nivel medio-bajo que comparte con Aragón, Castilla y León, Cantabria y Comunidad Valenciana.

Durante su presentación y respecto a la emergencia sanitaria, social y económica, el presidente del Consejo, Valentín Pich, señaló que es imprescindible elaborar estrategias “claras y flexibles” para promover no solo que se recupere el estado previo a la aparición del virus, sino que aumente la competitividad.

Aconsejó emprender una nueva etapa de desarrollo “a la mayor brevedad posible ante un mundo que ha cambiado”. Según recoge Efe, para Pich las medidas a adoptar para la recuperación deben ir orientadas a un modelo general de crecimiento económico más sostenible y basado en el capital humano, el conocimiento y la tecnología.

El coordinador del informe, Patricio Rosas, indicó que la competitividad estructural aumentó un 3,2 % en 2019, en sintonía con la desaceleración generalizada que muestran los datos de la Contabilidad Regional de España.

No obstante, ese crecimiento agregado del Índice de Competitividad Regional (ICREG) en 2019 se situó por encima de la variación media del periodo 2008-2019, aunque por debajo de la alcanzada en la etapa de recuperación y es dos puntos menor a la de 2018.

Añadió que el ICREG aumentó en 12 de las 17 autonomías y descendió en Aragón y Asturias; Madrid, Navarra y el País Vasco continúan siendo las más competitivas y Extremadura, Andalucía y Canarias se mantienen en los tres últimos lugares.

Rosas dijo que, como se apuntaba en el anterior informe, se confirma “la atonía competitiva” de Cataluña, frente al “leve y moderado” dinamismo de Madrid y País Vasco y el intenso crecimiento de Navarra.

Según el informe, en el caso de Cataluña, la crisis institucional incidió negativamente en varios indicadores o ha frenado su mejoría en otros, por lo que su ICREG apenas varía respecto al de 2018, “evidenciando un cierto estancamiento”.

El director técnico del informe, José Carlos Sánchez de la Vega, señaló que la evolución del ICREG muestra un perfil “claramente procíclico” y que los ejes relativos a Capital Humano, Innovación y Mercado de trabajo, que contempla el estudio, son los que presentan en 2019 los avances más importantes.

A su juicio, solo se observa un descenso significativo en el referido a la Eficiencia empresarial, que atribuyó al “desfavorables comportamiento de la competitividad” y al descenso de las exportaciones.

Respecto a los fondos europeos y su contribución a mejorar la economía, el presidente del Club de Exportadores e Inversores Españoles y vocal del Consejo Consultivo del ICREG, Antonio Bonet, indicó que no deberían obtenerse únicamente con presentar proyectos, sino que deben encajar con las directrices marcadas por la UE y estar en relación con los ejes estratégicos.