Inflación y alza de tipos traen de cabeza a pymes y autónomos en Galicia

Educadores financieros ofrecen a las familias y a los emprendedores herramientas para ahorrar
Financiación
José Calviño
Por la izquierda Claudio Grossi, relator de la Norma Calidad EF UNI 11402; Sergio Sorgi, sociólogo experto en bienestar; Caterina Ruzza, titular del Comité Educación Financiera de AEPF con Dositeo Amoedo, presidente de la asociación y Javier Santacruz, vicepresidente

Los niveles de inflación récord actuales, que no se veían desde hace casi 40 años, “no parece que vayan a descender en el futuro próximo”. Este fenómeno se ‘come’ literalmente los ingresos y ahorros de las familias cada mes que pasa. Además, pymes y autónomos, que también lo sufren, tendrán que enfrentarse al alza de los tipos de interés que, tras once años de pausa y en terreno negativo, volverán a crecer en Europa.

Para poder combatirlo, toca “hacer malabares con su presupuesto familiar” y tomar decisiones que afectan al consumo, a los compromisos financieros y al ahorro. Lo mismo ocurre con los emprendedores, que están ahora en un escenario muy delicado. A los precios se une problemas como el aumento del precio de pedir dinero prestado, costes altos para empezar un negocio, poca asesoría real para hacerlo de la mejor manera posible, etc.

A estas conclusiones se llegó en el VII Foro Internacional de Educación Financiera de Calidad celebrado esta semana en Santiago de Compostela, en el que se dieron a conocer herramientas, métodos y hábitos para mejorar la educación económica de las personas en temas como jubilación, inversiones o ahorro. Organizado por la Asociación de Educadores y Planificadores Financieros (AEPF), el objetivo, según destacó en la clausura el presidente de este colectivo, el gallego Dositeo Amoedo, es “compartir y poner en común herramientas, modelos y novedades en el mundo de las finanzas personales y su educación, para darle al educador financiero la importancia que merece en la situación actual”.

En el foro se puso de manifiesto que en este dinámico contexto “muchos de los autónomos que se embarcan en este viaje lo hacen por la necesidad de tener que trabajar para poder mantenerse, y también en muchas ocasiones pecan de falta de planificación empresarial general para que el proyecto empiece con una buena base”.

Los educadores financieros, siete mil en toda España, 300 de AEPF, les ofrecen ayuda a través de herramientas especificas para ellos, y estrategias separar el riesgo empresarial del riesgo familiar.

Es un reto que España sea uno de los países con los peores niveles de educación financiera de Europa. “Es un aspecto que nos lastra ya que, según diversos informes, los países con mejor educación financiera general salen mejor de las crisis y están mejor preparados para ellas”, alegan. Además, que la ciudadanía sepa gestionar su patrimonio y sus ingresos, planificar y valorar el servicio de los intermediarios financieros, es algo muy bueno para contar con una sociedad cada vez más preparada para tomar decisiones financieras en su ámbito personal y familiar.

Por ello desde esta profesión pretenden formar y dotar de herramientas a las personas para que sean capaces de gestionar su patrimonio personal de forma eficiente en el día a día. La educación financiera es una actividad que se debería realizar desde el periodo escolar hasta la jubilación, ya que cada época y momento tiene sus desafíos particulares y necesitan ser gestionados con la singularidad de sus situaciones.

Futuro de las pensiones

En el foro en Compostela también se habló como hemos podido comprobar recientemente con la gran cantidad de cambios que quieren hacerles, es síntoma claro de que incluso a medio plazo no son sostenibles. La generación del ‘baby boom’, que en 10 años engrosará en su mayoría las listas de pensionistas, “tendrá difícil cobrar el nivel actual de pensiones, pero más difícil aún será mantener para el estado este ritmo”

Aquí la labor del educador financiero es clara: concienciar a la persona hacia una solución financiera personal, prevenir, ahorrar, invertir, para que cuando haya terminado de trabajar, gracias a una atención temprana y a una estrategia eficiente tenga el nivel de ingresos merecido.

La clave es invertir: “Si las familias quieren tener recursos en el futuro para atender el máximo de necesidades es clave la planificación de la inversión, solo así se consigue rentabilidades por encima de la inflación sin arriesgar más de lo debido”. La planificación es la herramienta clave de los educadores en un momento en el que es tan difícil conseguir rentabilidad para el ahorro, en un momento en el que parece que solo invirtiendo en cryptoativos se puede ganar dinero, aunque la final es justo al revés.