La eólica gallega y Ence defienden su rol energético verde y asequible
La Asociación Eólica de Galicia (EGA) recuerda, ante del precio del mercado eléctrico de los últimos días, que la energía eólica es la mejor herramienta de la que dispone España para reducir la factura eléctrica. Por su parte, Ence recordaba también el miércoles que a través de la geración de energía renovable con biomasa contribuye durante el invierno a “soportar el aumento de la demanda eléctrica en España, aportando al sistema nacional energía gestionable y sin elevar el precio del recibo eléctrico para los hogares”.
Desde EGA recordaban que “en 2020 tuvimos el precio del mercado eléctrico más bajo de los últimos 10 años” por la caída de la demanda y la mayor aportación renovable. En cambio, en el anómalo arranque de 2021 se dispara el precio de la luz por la producción eólica anormalmente baja y la brutal demanda energética ya no solo en España, sino en todo el mundo, que apreció un 30 % el gas.
Porque, ahora que apagamos el carbón, toca tirar de las centrales de ciclo combinado de gas, la fuente más cara que marca el precio de las subastas mayoristas. Pero EGA apunta que es coyuntural, y cuando la meteorología vuelva a la normalidad, volverá a bajar la electricidad de forma progresiva. Porque giran los arerogeneradores, en su caso.
Por eso defienden continuar con un desarrollo eólico sostenible que ayude a reducir la dependencia energética del exterio: “cuanta más energía eólica generemos, menos pagaremos en la factura de la luz”, alega este sector. Además indican que con el desarrollo de los sistemas de almacenamiento se derribará “la última barrera” y se podrá contar “con energía eólica limpia y barata incluso cuando no sople el viento”.
Biomasa
En cuanto a Ence, en un comunicado explicó que con su potencia instalada de 266 megavatios (MW) en sus plantas, es capaz de abastecer a medio millón de hogares con una fuente renovable, natural y local: la biomasa agroforestal.
Ence dispone de una capacidad de producción anual de 1.700 gigavatios/hora al año (GWh), resaltando que una de sus ventajas es su carácter plenamente gestionable, independientemente de la meteorología, lo que convierte a esta fuente renovable “en un factor estratégico para el sostenimiento del suministro, y esencial, por tanto, en la necesaria transición justa hacia un modelo energético descarbonizado.
Explica la compañía fabricante de celulosa y productora de energía que operó con normalidad sus plantas de biomasa a pesar de las dificultades creadas por la borrasca “gracias al suministro de biomasa local” y al “compromiso” con las comunidades donde opera.
Además, en sus biofábricas de celulosa de Navia e Pontevedra Ence genera energía renovable a partir de biomasa y lignina, con una potencia instalada de 111 MW y una capacidad de producción anual de 900 GWh, que las convierte no solo en autosuficientes, pues vierten a la red eléctrica su excedente de producción.
Recuerda Ence en un comunicado que es “la primera empresa de España en producción de energía renovable con biomasa forestal e agrícola”, fuente que presenta “numerosos beneficios” por su “capacidad de creación de empleo, de desarrollo rural y de contribución a la mejora del medio ambiente”.