Médicos de Ourense denuncian sobrecarga en la sanidad pública
El Colegio de Médicos de Ourense cargó este lunes contra el Sergas ante los problemas que aún arrastran los hospitales públicos gallegos. Acusando lentitud y falta de respuesta a las propuestas promovidas por múltiples agentes del sector en los últimos años, destacaron que los sanitarios están “sobrecargados y exhaustos”, que comienza a cundir una “cierta desmotivación” entre ellos y hasta que, a falta de mejoras, las dificultades se siguen acumulando sin cesar. “Planes sobre el papel, sobran. Valentía y voluntad política para llevarlos a cabo, asumiendo si es preciso la impopularidad que alguna de las decisiones pueda implicar, no se han visto con mínima continuidad”, resaltaron desde el órgano provincial.
A través de un comunicado remitido en relación a las afirmaciones publicadas recientemente en ciertos medios locales, la Junta Directiva de la entidad médica consideró necesario compartir su valoración de la situación asistencial en la sanidad ourensana, que bajo ninguna circunstancia es de “total normalidad”.
Según explicaron, las consecuencias derivadas tras la llegada del coronavirus en las patologías habituales (sobre todo las crónicas y complejas) sumadas a los déficits previos a la misma, que ya habían denunciado en distintas ocasiones, hacen que estén “en un momento muy difícil en muchos dispositivos y servicios esenciales” en Atención Primaria, Hospitalaria y Urgencias. Dicha situación es palpable “tanto en Ourense, como en Galicia y en la mayoría del Estado español”, lamentan.
A nivel autonómico, la escasez de las plantillas en muchos centros de salud y servicios hospitalarios y de urgencias o la dificultad en la cobertura de diferentes hospitales comarcales son “más evidentes que nunca al aumentar la demanda asistencial”, y “ponen de relieve la falta o la lentitud de la respuesta del Sergas”, en los últimos años, a las propuestas que formularon múltiples agentes sanitarios.
Estas iniciativas, a las que el Servizo Galego de Saúde no hizo caso o tardó en contestar, según manifiestan, se habrían centrado en modificar la política relativa al personal, con el objetivo de desarrollar “una buena y transversal estrategia de cronicidad”; en introducir con convicción nuevas fórmulas de organización del trabajo asistencial con roles más eficientes de los profesionales sanitarios; en implementar políticas de promoción del uso adecuado de los recursos por los ciudadanos “en vez de los mensajes de falsa accesibilidad que oímos habitualmente”; y, sobre todo, en una apuesta decidida por la autogestión de los equipos asistenciales con liderazgos centrados en la excelencia.
Ante el actual panorama y la pasividad que acusan, comentaron que “se ha perdido demasiado tiempo” y es complicado ahora, con un déficit estructural de la plantilla que se incrementará durante los próximos años, dar respuesta a estos problemas “que emergen con fuerza” en el entorno de la pandemia del covid.