detección. Sanidade deriva a los menores de 30 años a la realización de PCR en los puntos establecidos por el Sergas o en farmacias, dejando a un lado el COVID-auto // Cribados en Ourense, Barbadás, Ribadavia y Redondela TEXTO Ángela Precedo

Muchos jóvenes no verían un nuevo cierre de discotecas como un drama

Restricciones
Ángela Precedo

Contra lo que la gran parte de la población pueda pensar, hay muchos jóvenes gallegos que siguen siendo responsables con la situación que atraviesa la comunidad gallega y que saben que el virus todavía no se ha ido. Los botellones y las irreponsabilidades tras la apertura del ocio nocturno no se dan de forma generalizada entre toda la población de 18 a 29 años. Muchos creen que las restricciones deberían ser más duras y que se quitaron muy pronto.

Desde EL CORREO hemos realizado una encuesta a pie de calle eligiendo a varios jóvenes al azar para que nos indicasen su opinión. Algunos ya habían salido de fiesta el pasado fin de semana, mientras que otros todavía no se atreven. Los que sí lo hicieron quedaron realmente asustados con algunas escenas que tuvieron que presenciar. Desde botellones en las calles hasta prescindir de la mascarilla en interiores una vez que el alcohol empieza a hacer su efecto. Por ello, una vez testeado de primera mano el funcionamiento del sector, y pese a que creen que los hosteleros no tiene la culpa, no verían negativo un nuevo cierre del ocio nocturno.

Por el momento, la propuesta que plantea el Gobierno gallego para aquellos municipios en nivel de riesgo medio pasa por la realización de test para poder entrar en los locales. En concreto, los interesados en salir de fiesta este fin de semana en Culleredo, Ribadavia, Ourense, Barbadás, Caldas de Reis, Poio, Pontevedra, Marín, Redondela y Salcela de Caselas deberán acreditar un certificado de vacunación o una prueba PCR negativa realizada en las 48 horas previas. En caso contrario, se quedarán fuera de pubs y discotecas.

El COVID-auto se postula, de este modo, como la opción más cómoda y rápida para poder obtener un documento que permita entrar enlos locales, pero, Sanidade ha optado por derivar a los jóvenes a los puntos de cribado masivo que estos días se han desplegado por la comunidad gallega o a las farmacias, donde se toman muestra de saliva.

Pero, centrándonos en los cribados, ¿son suficientes los que están en marcha en los municipios gallegos como para garantizar que todos los jóvenes de los ayuntamientos en riesgo medio pueden salir en su zona? La respuesta, a estas alturas de la semana, parece ser que no. En concreto, en solo cuatro de las diez poblaciones en riesgo medio tienen cribados programados. En Ourense están citados este sábado 3.000 jóvenes de 18 a 35 años tanto de la propia ciudad como de Barbadás. En Ribadavia, este jueves se convocó a 450 vecinos de 16 a 30 años. Y en Redondela se hicieron pruebas el martes a 418 personas.

La otra parte del amplio dispositivo que esta semana pretende cribar a un total de 10.000 personas se está concentrando en la comarca de O Salnés, donde tres municipios están en riesgo alto y sin posibilidad de abrir. En concreto, en Vilagarcía se citó a 2.000 personas de 20 a 29 años; en A Illa a 997 de 20 a 39 años; y en Cambados a 2.500 de 20 a 29 años. Sin el COVID-auto, habrá que intensificar estos puntos de detección de casos.