Plazo extra de 6 semanas para que cuaje la venta de San Cibrao a GFG Alliance
El futuro del aluminio primario gallego (y de toda España) se ha convertido en el culebrón sin duda más eléctrico del verano, con permiso de todo aquello que tiene que ver con la pandemia. Sin embargo, con todas las partes implicada sentadas a una misma mesa y con voluntad de diálogo, su resolución podría ser cosa de no más de seis semanas. Este es el plazo extra que, hasta el 28 de septiembre, han trasladado Gobierno central y Xunta al comité de empresa y a a la propia Alcoa “con el objetivo de lograr que se garantice el mantenimiento de la actividad industrial en la planta de Alcoa San Cibrao y de los puestos de trabajo vinculados a la factoría”.
Lo hicieron en el transcurso de una nueva reunión, esta presencial y en Madrid, que dio continuidad al encuentro celebrado el pasado miércoles, día 5, y a la que, además del secretario general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, Raúl Blanco; el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde; el responsable de Política Industrial y Sectorial de CCOO de Industria, José Manuel Casado; el secretario general de UGT FICA, Pedro Hojas; y el secretario xeral de la CIG, Paulo Carril; se sumó en esta ocasión –a la primera no había acudido, pese a estar citado– el presidente de la multinacional propietaria del complejo en España, Álvaro Dorado.
La extensión de seis semanas, hasta finales del mes que viene, del periodo de consultas del expediente de regulación de empleo (ERE), compromete a Alcoa “tanto a negociar una operación de compra-venta en exclusividad con GFG Alliance (Liberty House) como a mantener la actividad industrial en la fábrica”, apunta el documento conjunto remitido por las dos administraciones al término de este nuevo cónclave.
En este tiempo, la multinacional se compromete también a informar regularmente a las dos administraciones y a los órganos y representantes de cada organización sindical de la evolución de las negociaciones. Será “en el marco de una mesa industrial” y se constituirá una comisión formada por un representante de la Xunta, otro del Ministerio, uno por cada central (CCOO, UGT y CIG) y otro a mayores de cada uno de los sindicatos que conforman el comité de Alcoa San Cibrao.
Se especifica que el plazo extra tiene como prioridad “cerrar un acuerdo de compra-venta, fijando el 27 de septiembre como fecha límite para conseguirlo”. Si no se concreta dicho acuerdo, las partes que integran la comisión negociadora –Alcoa y comité de empresa– se reunirán el 28 de septiembre con el propósito de finalizar el periodo de consultas.
La propuesta trasladada por Xunta y Moncloa se remitió al comité de empresa –no presente en la cita– y a Alcoa –que sí estaba– para su aceptación, que en cualquier caso se deberá ratificar en el marco de la comisión negociadora, que tendrá de margen para volverse a reunir hasta mañana jueves, día 13.
Los dos Ejecutivos, central y autonómico, quieren reiterar su compromiso para seguir trabajando conjuntamente con todas las partes y lograr que el proceso de compra-venta de la planta de Alcoa San Cibrao “tenga las certezas necesarias para que dicha operación sea efectiva y se alcance una solución viable”. También valoran y agradecen la “buena fe” del comité y la propia Alcoa para retomar la senda del diálogo y la negociación a partir de esta propuesta. “Contar con un marco temporal más amplio es demostrativo del esfuerzo de ambas partes por alcanzar un acuerdo y buscar la mejor solución”, concluyen Xunta y Moncloa, al alimón.