Rebajan la tensión los trabajadores de Ence vinculados con CCOO

Confianza en la palabra dada por la ministra en la plantilla de que todos buscarán soluciones
Ley de Cambio Climático
Elena Piñón
Un trabajador de Ence en Pontevedra ligado a CC.OO. durante la última protesta en Madrid. Foto: Ricardo Rubio/E.P.

Desde el sindicato Comisiones Obreras explicaron el jueves que confían en la palabra de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, por lo que rebajará la intensidad de las movilizaciones en el conflicto de Ence.

La presidenta del comité de oficinas de Ence en Pontevedra, Ana Cedeira, y el secretario de organización comarcal de Comisiones Obreras, José Luis García Pedrosa, comparecían en rueda de prensa para informar de la reunión mantenida este miércoles con la ministra de Transición Ecológica, de quien confían en su compromiso de que el artículo 18.4 de la nueva Ley de Cambio Climático no se aplicará de forma retroactiva a la concesión de la fábrica pastera de Lourizán.

Una vez obtenido este compromiso por parte de la ministra el sindicato anunció que rebajará la intensidad de las movilizaciones que protagonizaba, aunque continuará con las protestas en la calle.

De hecho, avanzan que sus próximas movilizaciones que serán el día 26 de marzo ante la sede de la Diputación de Pontevedra y la Subdelegación del Gobierno, si bien ya no pedirán la eliminación de este artículo de la Ley de Cambio Climático, sino que reclamarán la convocatoria de una mesa de negociación para abordar el futuro de Ence y la continuidad de los puestos de trabajo de la fábrica de Lourizán.

Ana Cedeira indicó que las movilizaciones sirven para que la ciudadanía visibilice el alcance y repercusión que tendía el cierre de la factoría de celulosas. Al respecto, aseguraron que no acudirán al pleno del Ayuntamiento de Pontevedra donde el grupo de gobierno local espera declarar persona non grata al presidente de Ence, Ignacio de Colmenares y Brunet. “Tampoco tenemos ninguna fijación especial con el Ayuntamiento”, ha dicho Pedrosa.

Según trasladan, la ministra reiteró que lo que sí afecta a la permanencia de Ence en la ría es el recurso judicial sobre la prórroga de su concesión, pendiente de resolución en los tribunales.

También les aseguró “que bajo ningún concepto se iba a presentar ningún recurso contra la sentencia de la Audiencia Nacional por parte de ese Ministerio”, según resumió Ana Cedeira. García Pedrosa dijo estar “moderadamente satisfecho” porque se abre una “puerta al diálogo” en la que, gracias a su presión, según manifestó, estarán representados “todos los afectados” por un hipotético cierre de la pastera; es decir, los trabajadores de la fábrica y también los de las empresas auxiliares, el sector forestal y el logístico, además de las tres administraciones: Xunta, Gobierno central y el Ayuntamiento de Pontevedra.

Tanto Cedeira como García Pedrosa culparon de “obstaculizar” este encuentro con Teresa Ribera al delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, y al secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, entre otros dirigentes socialistas en Galicia como Guillermo Meijón o Tino Fernández.