Se elimina ya este curso el examen de recuperación para Secundaria

No se aplicará la moratoria de un año pedida por Galicia, Madrid y Andalucía // Serán los docentes los que lo decidan // Sí se harán las pruebas en Bachillerato
Educación no universitaria
Rosa Ríos
Primer día de curso en el CEIP Manuel Mallo de Nadela. Foto: Carlos Castro/E.P.

Finalmente, el Ministerio de Educación eliminará este mismo curso los exámenes de recuperación en la Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO), porque tiene que cumplir con el dictamen emitido por el Consejo Escolar del Estado sobre el tema, según fuentes del departamento de Pilar Alegría.

Las consecuencias de la decisión suponen que no se aplicará la moratoria de un año que había aceptado la ministra tras la petición de las comunidades autónomas de Galicia, Andalucía y Madrid para mantener las repescas este curso. Precisamente la Xunta había decidido que los exámenes de recuperación de septiembre pasarían a junio en ESO, 1º de Bachillerato y 1º de FP Básica desde este curso, que ya no serán posibles en el primer nivel.

“La recomendación especial” del Consejo Escolar del Estado es de obligado cumplimiento y exige eliminar la disposición transitoria quinta, donde se preveía aplazar la eliminación de estas pruebas. La argumentación se basa en que no puede haber diferentes criterios según qué territorio autonómico.

La eliminación de los exámenes de recuperación viene recogida en el futuro real decreto de Evaluación, Promoción y Titulación, que el Consejo de Ministros aprobará el próximo martes, según fuentes ministeriales. El real decreto establece que las decisiones sobre promoción y evaluación de la ESO serán adoptadas colegiadamente por el equipo docente, sin que sea obligatorio realizar una prueba extraordinaria o examen de recuperación de las materias no superadas, que sí tendrán que realizar los alumnos de bachillerato.

Estipula asimismo que la evaluación en la ESO será “continua, formativa e integradora” y que cuando el progreso de un alumno no sea el adecuado, se establecerán medidas de refuerzo.

Los estudiantes de ESO pasarán de curso cuando el profesorado considere que las asignaturas no superadas no les impiden seguir con éxito el curso siguiente y se estime que tienen expectativas favorables de recuperación. Así, tendrán el título de ESO los que hayan adquirido, a juicio de los docentes, las competencias establecidas y alcanzado los objetivos de la etapa.

La última ley educativa (Lomloe) modifica de forma significativa cómo se regula la evaluación, la promoción y la titulación y concede una especial relevancia a la actuación colegiada del equipo docente, a quien se otorga la responsabilidad última de la decisión de pasar de cursos y obtener la titulación.

La ley Celaá pone el foco en los mecanismos de refuerzo. Por ello dispone que la permanencia en un mismo curso debe ser algo excepcional que solo se podrá adoptar una vez durante la primaria y dos veces como máximo en ESO. Uno de los objetivos de este nuevo real decreto de desarrollo de la Lomloe es evitar la repetición (España triplica la tasa de la OCDE).

Los sindicatos UGT y Stes creen que la medida es acorde a los objetivos de la Ley Celaá, uno de ellos mitigar el fracaso escolar.