Se incrementaron un 61,1 % las llamadas al 016 en el mes de abril

Las situaciones de riesgo aumentaron con el COVID // Es la segunda cifra histórica más alta
Alejandro Espiño
concurso de lemas nas escolas: ‘se me controlas, non me molas’. La secretaria xeral de Igualdade, Susana López Abella (en la imagen) dio a conocer los centros escolares ganadores del concurso de lemas convocado por la Xunta con motivo del 25-N. Algunos de los premios fueron para: Multiplica a igualdade, dividirás a violencia; Se me controlas, non me molas; A violencia repúlsame, a igualdade impúlsame. Foto: Xoán Crespo

Los datos reflejan que la pandemia del coronavirus empeoró muchas situaciones, entre ellas la de las mujeres víctimas de maltrato, en muchos casos confinadas con sus agresores. Y es que, según los datos del boletín de la Delegación del Gobierno contra la violencia de género, las llamadas realizadas al 016, que es el servicio telefónico de información y asesoramiento jurídico en materia de violencia de género, se incrementaron en un 61,1 por ciento durante abril, en comparación con el mismo mes del año pasado. Concretamente, fueron 8.692 llamadas frente a las 5.396 de 2019, la cifra más alta de los tres últimos años y la segunda más alta desde que hay registros.

Son cifras recogidas por el sindicato UGT-Galicia, que recordó este martes que el empleo es esencial para combatir la violencia machista y demanda contundencia contra ella. El lema de la central sindical de este año es Valórame, non me maltrates.

Las situaciones de riesgo para las mujeres se incrementaron en el confinamiento, entre otras razones por el mayor tiempo de exposición al agresor en el hogar y por un mayor nivel de desempleo y empobrecimiento.

Los datos del Observatorio Estatal en esta materia son escalofriantes, ya que desde el 1 de enero de 2003 al 13 de noviembre de 2020 eran 1.074 las mujeres asesinadas en España, 63 de ellas gallegas, a manos de sus parejas. Desde el primero de 2020 hasta el 13 de noviembre murieron a manos de sus maltratadores 41 mujeres en España –2 gallegas– y 23 menores quedaron huérfanos.

Son las cifras elevadas las que hacen que el sindicato reclame recursos y servicios para una prevención integral y efectiva y “poner fin a la precariedad de las personas, mayoritariamente mujeres que dan soporte a las víctimas”.

UGT-Galicia recuerda que el empleo es “esencial” para combatir esta lacra. A pesar de que la violencia de género se da en todos los estratos económicos y socioculturales y que las estadísticas oficiales no recogen datos sobre esta relación, recoge el sindicato en un informe, “es evidente que existe una estrecha conexión entre ambos”.

Un estudio realizado a nivel europeo, Proyecto WeGo!, destaca que la independencia económica es un elemento “crucial”: el 82,5 % de las mujeres que sufrieron violencia son poco independientes económicamente frente al 17,5 % que tienen un gran nivel de ingresos. El 40,9 por ciento tiene trabajo mientras que el 59,1 % son desempleadas.

Solamente el 13,3 % de las mujeres viven en una casa de su propiedad, el 14,8 % la comparten con su pareja y el 73,7 % tienen hijos a su cargo. El 71 % de las víctimas destaca el desempleo y las situaciones de precariedad como los principales frenos para denunciar.

DENUNCIAS Con respecto al número de denuncias, en 2019 se incrementaron un 0,2 % en comparación con el año anterior, y hasta septiembre de 2020 se presentaron 2.886 denuncias. Entre los motivos para no denunciar, una macroencuesta puso de manifiesto que muchas mujeres que sufren esta otra pandemia no la denuncian por no considerarlo lo suficientemente graves o no darle importancia y creer que podían resolverlo solas, por miedo al agresor y a las represalias, por vergüenza, por sentirse culpables, por los hijos, por temor a que no las crean o por no disponer de medios económicos propios.