Llegan buenas sensaciones a Pontevedra y Santiago, donde más bajó la ocupación del primer semestre de 2021 al mismo periodo de 2019 // Entre ambos intervalos los negocios de las siete ciudades perdieron más de 600.000 turistas TEXTO R. Ponte

Un agosto espectacular inunda los hoteles de las urbes gallegas

Ocupación hotelera
Ramiro Ponte
turismo. Decenas de visitantes en el casco histórico de Santiago durante este mes de agosto “espectacular” en ocupación hotelera. Foto: A. Hernández

Pasan del millón las pernoctaciones que perdieron nuestros hoteles urbanos (los situados en alguna ciudad gallega) entre los primeros semestres de 2021 y 2019, cuando la pandemia todavía no había llegado a Galicia para alojarse indefinidamente. Su caída interanual representa un 60,6% y responde al menor número de viajeros (más de 600.000 menos) contabilizando durante los seis meses que abrieron el presente año. No obstante, profesionales del sector hotelero destacan estar viviendo ahora un “agosto espectacular”.

Así lo está siendo para César Ballesteros, dueño del Hotel Bahía Vigo y presidente de la Asociación Empresarial de Hospedaje de Pontevedra. “Debería rebobinar para ver cómo fue el primer semestre”, cuenta al ser cuestionado sobre su valoración del mismo, prosiguiendo con un contundente “muy duro”.

“La primera parte del año estuvimos con cierres perimetrales y hoteles vacíos”, recuerda, y no fue “hasta marzo o abril” cuando la cosa empezó “a moverse algo”. Sin embargo, subraya asimismo , “todos los datos que se den ahora en materia de turismo están totalmente tergiversados por la situación de la covid”.

Precisamente sobre números y cifras destaca la última estadística del INE, que expone el enorme retroceso que sufrió la ocupación hotelera en los grandes concellos durante el primer semestre de 2021 en comparación al idéntico periodo de 2019.

Conforme consta en sus cálculos, los hoteles localizados en las siete ciudades gallegas pasaron de tener 936.044 huéspedes (entre enero y junio de 2019) a 335.819 inquilinos temporales (para el mismo intervalo de 2021): exactamente un total de 600.225 menos o un -64,1%.

Por urbes, Santiago fue la más lastimada (con una disminución del -76,2%, pasando de 337.660 a 80.348 viajeros), seguida del -64,4% de Pontevedra (que bajó de 51.192 a 18.634), el -60,1% de A Coruña (de 205.274 a 82.012), el -56,6% de Vigo (de 183.010 a 79.959), el -54,4% de Ferrol (de 22.943 a 10.473), el -54,2% de Lugo (de 67.680 a 31.318) y el -51,1% de Ourense (de 68.285 a 33.075).

Respecto a las pernoctaciones, el número de noches reservadas en los hoteles ubicados en las siete ciudades gallegas descendió de 1.840.451 a 725.699 entre los semestres referidos con anterioridad: concretamente 1.114.752 menos o un -60,6%.

En este caso, Santiago volvió a ser la más castigada (con un detrimento del -73,6%, pasando de 624.373 a solo 164.997), continuada del -66,4% de Pontevedra (de 111.735 a 37.928), el -61,1% de Lugo (desde los 132.580 hasta los 52.334), el -55,5% de Vigo (de 403.922 a 180.098), el -53,6% de A Coruña (de 415.868 a 193.493) y el -52% de Ourense (que pasó de los 108.597 a solamente 51.905).

En esta línea, impresiona la anómala conducta de Ferrol, donde la cantidad de noches reservadas en sus hoteles es superior en el primer semestre de 2021 respecto al mismo periodo de 2019. Se contabilizaron 1.568 pernoctaciones más (pasando de 43.376 a 44.944) pues, aun reduciéndose en más de la mitad su cantidad de turistas, la estadía media se incrementó un increíble 127%.

DESTINO “SÚPER ATRACTIVO”. Con estos datos tan edulcorados por la pandemia y tras aprender “a golpe de golpes y palos”, César Ballesteros remarca que en estos momentos es “muy complicado hacer predicciones” de cara al 2022. Sobre este mes, por ejemplo, tenían “grandes incertidumbres de cómo iba a resultar”, pero por ahora se está constatando “un agosto espectacular, inesperado y muy por encima incluso de las mejores previsiones”.

Aún así, considera que “vamos a ir volviendo a cierta normalidad” y cree que en esa nueva fase “Galicia va a ser un destino súper atractivo”. Sin más detalle y evitando estancarse en los malos datos del primer semestre, el presidente de Asehospo añade que “la gente se está yendo encantada” de nuestra comunidad y esas son las sensaciones que él prefiere: “Me quedo mucho mejor con lo que estamos saboreando ahora”.

FALTAN EXTRANJEROS. Desde la ciudad más impactada por el decrecimiento de la ocupación hotelera, Carlos Regueiro, propietario del Hotel San Lorenzo y vocal de hospedaje de la Asociación Hostelería Compostela mantiene también que este primer semestre “fue muy malo” en Santiago si se compara con los datos recopilados previa pandemia.

Cifrando en torno al 45% la misma, un porcentaje “muy bajo” que vincula a las restricciones municipales, echa además en falta la presencia del turismo internacional. “Los extranjeros ya nada, no contamos con ellos, no tuvimos en todo el año y, la verdad, no es que seamos dependientes de ellos, pero sí que ayudan mucho”, dice sobre otro hecho que respaldan los datos del INE.

En cuanto a lo mejor de los primeros seis meses del 2021, señala la pasada Semana Santa, “relativamente buena” si bien fueron “dos o tres días nada más”. Y a falta de foráneos los visitantes españoles sí se portaron bien “pero a raíz del verano”.

“El turismo nacional fue explosivo en julio, y sobre todo agosto está siendo muy bueno”, apunta Carlos Regueiro en sintonía con las declaraciones de César Ballesteros, esperando que el próximo 2022 “sea el año verdaderamente Xacobeo, donde haya unas ocupaciones como las que hubo en 2018 y 2019”.