Innovación. La Asociación de Vecinos y Vecinas de Grou se dio cuenta, durante la pandemia, de la necesidad de contar con un espacio para formarte en el uso de Internet TEXTO Iago Couce

Un espacio de coworking para dinamizar el pueblo

Desarrollo rural
Iago Couce
Sala de trabajo. El antes de uno de los espacios del edificio donde se va a desarrollar el proyecto. Foto: Asociación de Vecinos de Grou

En los últimos tiempos, Internet supuso la revolución en muchos aspectos, pues nos facilita sobremanera las cosas para realizar cualquier trámite. Con todo, no todos saben cómo hacerlo o no tienen los conocimientos necesarios para ello.

Sin embargo, en muchos pueblos o lugares de Galicia, incluso de España, no cuentan con un espacio donde poder realizar estas tareas o aprenderlas. Pero ese no es el caso de San Mamede de Grou. En esta parroquia ourensana, gracias a su asociación de vecinos, este lugar será accesible para todos una vez terminen las obras, previstas para el quince de noviembre.

Pero antes de meternos en materia, es necesario explicar por qué es esta agrupación quien realiza e impulsa esta medida y no es el propio Ayuntamiento de Grou.

En este sentido, la presidenta de la asociación de vecinos, Susana Rodríguez, indicó que, “aínda que ten unha liña de axudas ao medio rural, eses cartos van destinados a mellorar, por exemplo, algún camiño que apenas é transitado”.

Por eso, para ella “hai certo abandono por parte do concello, entón, eu entendo que o desenvolvemento rural levámolo as persoas”. Con todo, asevera que “tamén ten que haber conservación do patrimonio, do medio natural” pero que “isto pode estar pelexado co progreso e coa fixación de poboación, ca creación de empresas ou microempresas”.

Por esto, desde la agrupación considera que la dejadez provocó que los habitantes se acomodasen y esperasen que el Ayuntamiento resolviese los trámites.

La importancia de las nuevas tecnologías. Curiosamente, con la llegada de la pandemia del coronavirus, Susana Rodríguez se dio cuenta de esta problemática de no contar con un sitio donde poder teletrabajar o donde les enseñasen a realizar trámites online.

En este sentido, y a pesar de “haber bastante xente nova, que está entre os trinta e os corenta anos, vimos que había moitas deficiencias e que nos facía falta coñecer as novas tecnoloxías, sabelas manexar”.

Además, “dímonos conta de que non había ningún sitio onde che ensinasen nada, a pesar de que hai moita formación que se imparte de maneira telemática”. Por eso, “nós plantexamos un laboratorio de informática, chamado así porque aglutina varias cousas, pero non deixa de ser un local dotado de equipos informáticos, impresoras e banda ancha. Ademais, conta cunha zona de coworking e cunha pequena biblioteca”, indica la presidenta.

Precisamente ese espacio de coworking, es uno de los puntos más importantes de ese proyecto, porque “vai estar dispoñible todo o ano”. En él, “buscamos que os veciños do pobo poidan aprender a realizar trámites ou teletraballar dende un sitio cun ambiente distendido”.

En relación a esto, afirma que “ese espazo non van ser catro mesas e catro sillas, senón que vamos a esmerarnos en que sexa un sitio moi agradable, pero de traballo”.

Asimismo, también explicó que la agrupación vecinal usará ese espacio “para facer unha reunión ou para botarnos unhas risas, porque agora non temos ningún, xa que o local social ó que íamos convertírono nun velatorio”. Por eso, hasta la finalización de este espacio, el Centro de Tracción Animal les deja una sala para que puedan juntarse.

En definitiva, el objetivo de la zona coworking es “animar á xente nova a que se quede no pobo e tratar de dinamizalo, dotalo de recursos e ferramentas para que se poida avanzar e progresar”, asevera Susana Rodríguez, a lo que añade que “nos pobos ten que haber de todo, pero ten que haber acceso a formarse, a mellorar e, sobre todo, a poder evolucionar como persoa”.

La acogida de la iniciativa en el pueblo. Como todo gran cambio en un pueblo, los innovadores están pendientes de cómo reciben su idea y cómo la valoran los vecinos. En este sentido, la presidenta de la Asociación de Vecinos de Grou tuvo mucha suerte, porque “aínda que o espazo aínda non está rematado, os veciños están encantados con esta nova iniciativa”.

Además, para darle aún una mayor importancia a las actividades a desarrollar en el laboratorio de informática, como aprender a usar Word o Excel, pedir citas por Internet, crear una cuenta de correo electrónico o simplemente navegar por Internet, también estuvieron contactando con distintas instituciones para ofrecer más formación.

Una de estas entidades, fue la UNED (Universidad Española a Distancia). “Contactamos con eles e pareceulles unha idea fantástica. Ademais, nos dixeron que teñen programas para adultos, programas para xente máis maior ou xubilados que non puideron estudar, que poden ser programas moi axeitados para o que buscamos”, apostilla la mandataria de la asociación vecinal.

En cuanto al futuro, Susana Rodríguez asegura que seguirán apoyando al máximo este espacio, trayendo nuevos cursos y mejorando los equipos actuales, para seguir buscando su objetivo principal, que es “fixar poboación e facer que empreguen ese espazo como unha axuda máis”. De esta manera, seguirán buscando que los jóvenes no se tengan que marchar a la “capital” o a otra localización para poder formarse, porque “con este espazo, poderán facelo sen gastarse un dineral”.

Por todo esto, este tipo de iniciativas se deberían fomentar más, en todos los pueblos de España y de Galicia, ya sea desde los Ayuntamientos, las empresas locales o las instituciones académicas. Esto es una forma de ayudar a crecer a lugares que, teóricamente, están menos avanzados tecnológicamente, pero debido a que no cuentan con el apoyo económico necesario para afrontar una revolución necesaria.