EL TIEMPO. Galicia roza el final de la estación estival con los valores medios más altos en las temperaturas desde que hay registros. 24 º de media en las riberas del río Sil TEXTO S. Arias

Un verano para los anales de la historia

El Tiempo
Sabela Arias
Una mujer se refresca en unos chorros de agua en Ourense a mediados de julio, en plena ola de calor. Foto: R.Veiga

El informe climatológico de Meteogalicia sobre el verano de 2022 pone cifras y hace oficial lo que la mayoría de ciudadanos intuía: el verano, desde el punto de vista meteorológico, ha sido histórico por las temperaturas alcanzadas. En cuanto a las precipitaciones, apunta la agencia meteorológica gallega, el verano climatológico, que empieza el uno de junio y remata el 31 de agosto, ha sido normal, pero respecto a las temperaturas, ha sido extramedamente cálido, un balance éste al que contribuyó de manera especial el mes de julio, que estuvo marcado por varios episodios de calor extremo.

Elaborado a partir de los datos recogidos en las estaciones más representativas de la comunidad y teniendo en cuenta su evolución durante el período de referencia 1981-2010, el informe de Meteogalicia apunta que la temperatuar media en el conjunto del período se situó en 20,7 grados, es decir, 1,6 grados por encima del habitual. La estación climatológica acabó registrando en su conjunto las temperaturas medias y máximas más elevadas de toda la serie histórica.

Por meses, julio fue extremadamente cálido y la temperatura media alcanzó los 22,4 grados, con una anomalía de +2,7 grados con respeto a los valores históricos registrados en las estaciones meteorológicas más representativas de lacComunidad. Agosto mantuvo una tónica similar debido a la persistencia de las situaciones anticiclónicas, siendo en su conjunto un período muy cálido.

El único mes que se desmarcó de la tónica general del verano en Galicia fue junio, marcado por una gran variabilidad de situaciones meteorológicas y los contrastes entre jornadas extremadamente cálidas y secas con un comienzo y un final de mes con predominio de temperaturas frías, por lo que, finalmente, resultó ser un período normal.

Diferencias geográficas. En cuanto a la situación por áreas geográficas, el comportamiento de los termómetros presentó ciertas diferencias. Así, mientras la media en el conjunto de la comunidad se situó en 20,7 grados, en el macizo ourensano de Manzaneda y en la sierra del Xistral se registraron los valores más bajos, en torno a los 14,7 grados, mientras que en las riberas del río Sil los termómetros llegaron a alcanzar, de media, los 24 grados.

En el que respeta a la lluvia, Galicia vivió en su conjunto un trimestre dentro de la normalidad. Las precipitaciones medias para las 16 estaciones meteorológicas de referencia fueron de 117 litros por metro cuadrado, apenas un 2% más del esperado para este período, por lo que el verano se considera, en su conjunto, normal.

Desde este punto de vista, junio fue el único mes del período caracterizado cómo húmedo debido a las lluvias inscritas durante la primera semana y los últimos 10 días. De hecho, el balance mensual fue de 86 l/m 2 , lo que significa que llovió un 78% más del previsto atendiendo a los datos históricos de referencia.

Déficit pluviométrico de un 66 POR CIENTO . La situación, apunta Meteogalicia, cambió a partir de julio, donde el predominio del tiempo anticiclónico hizo que las lluvias inscritas habían sido escasas mismo para esta época del año, con un déficit pluviométrico de un 66% respeto del habitual.

El verano climatológico finalizó con un agosto seco, en el que se mantuvo la tónica del mes anterior aunque la anomalía con respeto de las precipitaciones esperadas para esta época del año fue de un 39 %.

Lo reparto de la lluvia inscrita durante todo el trimestre no fue homogéneo en el conjunto de la comunidad. Así, los valores más altos se concentraron localmente en la Marina occidental, con cerca de 340 l/m 2 acumulados entre junio y agosto. Por el contrario, los registros más bajos se concentraron en gran parte de las provincias de Ourense y Pontevedra así como en las comarcas coruñesas de Bergantiños y #Terra de Soneira, donde apenas se recogieron 50 l/m 2 .

RÍOS Y EMBALSES. Tras las lluvias caídas esta semana en algunas zonas de Galicia, la Oficina Técnica da Seca ha constatado un leve incremento de los caudales de los ríos gallegos que, no obstante, siguen un 32 % más bajos que el promedio de la última década.

En lo que se refiere a los embalses, el nivel en los últimos quince días siguió descendiendo, a pesar de las lluvias registradas. Así, a día 5 de septiembre, los embalses de abastecimiento de la demarcación hidrográfica de Galicia-Costa registraban una ocupación del 65,8 %.

Las previsiones para este mes apuntan a la posibilidad de lluvias, pero las autoridades llaman a ser prudentes y seguir con las medidas de ahorro mientras los caudales de los ríos y las reservas de los embalses no estén estabilizadas.