Reseña Musical

La mezzosoprano Sarah Connoly: “5 Neruda Songs”, de Peter Lieberson, con la “RFG”

Ramón García Balado

“Destino: Latinoamérica”, programa del día con la “RFG”, dirigida por la principal invitada, Joana Carneiro en el Auditorio de Galicia-20´30h.-, quien será protagonista de la sesión “CONversando con...”- 19´45 h.-, en un programa que anuncia obras de Peter Lieberson, con las “5 Neruda Songs”, de las que será intérprete la mezzo Sarah Connoly; “Discovery”, del mejicano Carlos Chávez y los “Three Latin-American Sketches”, de Aaron Copland. Sara Conolly, estudió en la Queen´s Margaret´s School y en el Royal College of Music, integrándose en los “BBC Singers”, en principio en los géneros próximos al jazz, antes de decidirse por los barrocos y las músicas contemporáneas. Abordó roles como “Amina”, de “Der Rosenkavalier”, o los haendelianos “Xerxe” y “Giulio Cesare”, en el Festival de Glyndebourn, o “Dido” de “Dido and Eneas”, en el Covent Garden. Estrenó “Twice through the Heart”, de Mark Anthony Turnage, con Oliver Knuseen, J.Harvey y J.Taverner. Participó en “The Last Night of the Proms”, cantando “Rule Britania”, caracterizada como el “Almirante Nelson”. Recibió el reconocimiento de “Dama del Imperio Británico”, y en el Teatre del Liceu, interpretó los roles de “Agripina”, “Nerone”; de “L´Incoronazione di Poppea”, de Monteverdi y “Brängane”, de “Tristan und Isolda”

Peter Godard Lieberson, tuvo como maestros a Milton Babbit, C. Wuorinen, D.Martino y M. Boykan, en la Columbia University, siguiendo posteriormente con Chögyam Trungpa, quien le acercó al budismo tibetano Vajrayana. Asistió a cursos en la Brandeis University y en la Harvard Un., convirtiéndose en director artístico del Halifax Shamhala Center, de Nueva Escocia. Su segunda esposa, Lorrain Hunt, mezzosoprano, entró en su vida en 1997, durante una producción en la Santa Fe Opera, con su ópera “Ashoka´s”, para la que compondrá las “Rilke Songs” y las “Neruda Songs”, producto de un encargo de la O. F. de Los Ángeles y la Sinfónica de Boston, cuyo estreno se realizó el 20 de mayo de 2005, con la O. F. de Los Ángeles, Esa Pekka Salonen, y ella como solista, para repetir con la O. S. de Boston,, bajo la dirección de James Levine. Lorrain Hunt, murió de cáncer en julio del año siguiente, a los 52 años. Otro de los ciclos importantes, serán las “Songs of Love and Sorrow”, a propuesta de la O. S. de Boston. En 2007, ganó el “Grawemeyer Prix”, de la Louisville University. El compositor murió en 2011, por complicaciones de un linfoma.

Cinco son las canciones de Neruda: “Si no fuera porque tus ojos tienen color de Luna”, “Amor, amor, las nubes a la torres del cielo”, “No estés lejos de mí, un día solitario”, “Ya eres mía. Reposa tu sueño en mi sueño” y “Amor mío, si muero y tú no mueres”. Escritas para mezzo y orquesta. Destacábamos su ópera “Ashoka´s Dream”, a la que se añaden los ciclos de canciones, entre otro géneros como la música para orquesta o el repertorio camerístico. Ciclos como “Three Songs”, para soprano y ensemble de cámara; “King Cesar”, para narrador y grupo instrumental;, “C´mon Pigs of Western Civilitation Eat More Grease”, para barítono y piano; las citadas “Rilke Songs”, para mezzo y piano; “The Coming of the Light”, para barítono, oboe y cuarteto de cuerdas o “Rememebering JFK (An American Elegy”, para narrador y orquesta.

Carlos Chávez y A.Copland, se conocieron en los Estados Unidos, a mediados de 1928, en plena juventud, momento en el que el mejicano, se interesó por la música del país que visitaba y la amistad entre ambos, se haría duradera y estrecha. Obras de Chávez comenzarían a divulgarse gracias a la International Composer Guild, neoyorquina, antes de la vuelta su tierra, para acceder al cargo titular de la Orquesta Sinfónica de Méjico, cuando frisaba la treintena. Pasarán años antes de que en la década de los sesenta, Chávez culmine la gloria con obras como “Resonancias”, el ballet “Pirámide” o “Discovery”, de 1969, en el que se conmemoraba el bicentenario del descubrimiento de la bahía de San Francisco, por Gaspar Portola. Una obra para cuerda con acompañamiento ligero de vientos- flauta (doblada por el flautín), oboe, corno inglés, fagot, dos trompas y trompeta. El autor defendía la técnica no repetitiva de Discovery”, un proceso que creía que impedía la repetición y evitaba deliberadamente los intervalos que tendían a polarizar los centros tonales. Rasgos especiales son la densidad de la cuerda, extrema en las partes en que se usa una escritura a seis voces, los pasajes concertantes como el trío para trompeta con sordina y trompas, y un dueto de oboe y corno inglés.

Aarn Copland, con “Three Latin-American Stekches”, trabajo de un período de intensa conciencia social, en el que una figura descollante fue Marc Blitzstein. De los años de coincidencia con Chávez, guardaba memoria de las docencias de Boulanger y Arnold Schönberg. Aquí le hallaremos comprometido con las raíces latinas y producto de ello, serán el “Danzón Cubano”, para dos pianos; la composición orquestal “Three Latin-American Sketches”, de 1972, enraizándose en buena medida con las tradiciones norteamericanas, con vivos ejemplos de éxito internacional como “Rodeo”, “Salón Méjico” o “Billy The Kid”, procedentes de los años cuarenta, siempre un puente establecido que comunica épocas e indagaciones estilísticas, en las que no resulta extraño encontrar claras afinidades. La idea perceptible en cuanto a este compositor, por la capacidad de transformar un material básicamente sencillo, en nuevas formas impredecibles y musicalmente renovadoras, que sabrán calar a fondo en el gusto de los aficionados. En otro ámbito, descubriremos las influencias del jazz, que arraigaron en obras de juventud, con detalles como los aspectos percusivos en el piano.