“Alen”, de Eduardo Soutullo, es la obra ganadora del “X Premio de Composición AEOS-Fundación BBVA” y que para esta ocasión, se habían presentado un total de 54 originales. Fueron parte del tribunal en la cita, Andrés Lacasa Nikiforov, vicepresidente de la Asociación Española de Orquestas Sinfónicas (AEOS); Baldur Bronimann, director titular de la Orquesta da Casa da Música do Porto y presidente del jurado; Juan Pujol, adjunto a la dirección de la Fundación BBVA y María de Miguel, como notaria. Resultó ganadora esta obra de Eduardo Soutullo, “Alen”, quien recibió la noticia mientras se encontraba en Italia, como compositor residente en la Real Academia de España, preparando otra composición con fecha de estreno para la próxima primavera. Un motivo para celebrar el renovado contacto con otras orquestas nacionales, que pondrán la composición en atriles, como ya hizo la “RFG”, en octubre pasado, entre obras de J.Sibelius y E. Grieg, bajo la dirección de su titular Paul Daniel.
“Alen”, además de la cuantía económica, garantizará al compositor la interpretación de la misma por las orquestas pertenecientes a la “AEOS”, una puerta abierta para una temporada plena de alicientes. Soutullo reconoce que con este galardón, recibe una doble satisfacción: el reconocimiento de un certamen al que se había presentado varias veces y el beneficio que supondrá volver a tomar contacto con orquestas como la Orquesta Sinfónica i Nacional de Catalunya, con la que había colaborado en 2005. Sucede que muchas veces, en cuanto logras la aceptación por parte de una formación, puedes pasar a una situación de compás de espera por riguroso turno de temporadas. La obra, en concreto, resulta un homenaje al telúrico mundo que descubrió en la Porta do Alen, un monumento megalítico que sobrecoge a la primera impresión, sirviendo al tiempo de estímulo para la imaginación. Todo preparado para encarar la caída al abismo hacia esa puerta del más allá. Decía la tradición que había que atravesarla para acceder a una desconocida dimensión, elemento común en tantas mitologías ancestrales, forjadas a través del inconsciente colectivo.
Traducido en lo musical, será el músico quien se entregue al estímulo en horas calladas de creación, que se abordará con un criterio afortunadamente bastante libre de ataduras y con el riesgo consecuente ante lo que va cobrando forma lentamente. Baldur Bronimann, desde su condición en el jurado, comentaría que lo que impresionó al grupo de sus compañeros, con respecto a la partitura, fue la manera en cómo trató a la orquesta en cuanto al sonido en los planos más acuciantes, en esa aproximación a un mundo celta imaginario, esas sonoridades que a veces están entre el ruido y la nota, acercándose a la utilización de técnicas extendidas o microtonalidades, pauta eficiente en obras aventuradas en los planteamientos de las vanguardias. Exhibe una gran fantasía en esa búsqueda de un lenguaje propio y como ejemplo de una obra bien trabajada en los aspectos puramente técnicos, desarrollados en un espacio de tiempo ajustado.
Soutullo en cuanto a las orquestas de nuestra C.A., ha tenido una regular presencia gracias a la aceptación de trabajos estrenados desde “But in vain..” a “All the echoes listen” y “Erfahrung und sonst nichts”, “Quebui” y Pentaphonics”, obras orquestales o camerísticas y una ópera “Romance de lobos”- evidentemente sobre Valle-Inclán- y el cortometraje del proyecto Gesamt, del conocido cineasta danés Lars von Trier. Una trayectoria que ha merecido premios como el “VII Composition-Competion New Note” (Croacia 2018), el Red Note New Musical Festival Composition Usa” (Illinois); el “Lutoslawski Prize” (Varsovia) o el “International Prokofiev Competition” (San Petersburgo) y en cuanto al “Premio AEOS-Fundación BBVA”, que se interpretará por 31 orquestas, cuenta en la actualidad con una serie de registros en cd, de las cinco primeras ediciones, que tendrá continuidad en distintos recopilatorios. En la pasada edición, el ganador había sido Marcos Fernández Barredo, por “Nocturno sinfónico” y en la relación, destaca igualmente Fernando Buide del Real, por “Fragmentos de Satiricón”, quien lo obtuvo en la quinta convocatoria.
Rumon Gamba, que incluye en programa las “Danzas Polovtsianas”, de la ópera “El Principe Igor”, de Alexander Borodin, dirigió la pasada temporada un concierto en el que nos ofreció “The Perfect Fool, Ballet Music Op. 39”, de Gustav Holst; el “Doble concierto para dos fagotes y orquesta”- solistas Bram van Sambeer y Steve Harriswangler-, la “Escena de amor”, de “Romeo y Julieta” de H.Berllioz y la “Rapsodia Española”, de M.Ravel. Un director con plaza en importantes orquestas inglesas, en un firme defensor de repertorios contemporáneos, en los que nos encontramos compromisos como los estrenos de “Two Boys”. De Nico Muhly; con la “National English Opera”; el “Concierto para viola”, de Breat Dann: con el autor y la “O.S. de la BBC”; estrenos de Poul Rudens- “Dancer in the Dark”, y de Mark Anthony, “Turnage Blood on the Floor and Scherzoid”, con la NorrlandsOperan. En 2016, dirigió “The African Prophetss, de Larsson Gothe y la NorrlandsOperan. En el Festival Enescu, se presentó con obras de Sven Helbig y Rolf Martinsson y en el 2017, estuvo en los “BBC Proms”, para un encargo del ente, con un trabajo de Michael Gordon. En este curso, abordó la realización de un proyecto de la “Isla Nación” de Francesco Tristano, con la “O.F. de Hong-Kong y la “BBC Philharmonic O.” Los primeros años de formación de Rumon Gamba, le sitúan en la “Royal Ac. of Music” , con Colin Metters.
Las tan populares “Danzas Polovstsinas” del “Príncipe Igor”, la ópera de Alexander Borodin, que se dio a conocer en versión de concierto en San Petersburgo el 27 de febrero de 1879, dirigida por su amigo y compañero N.Rimski-Korsakov, con el típico despliegue de grandes coros enraizados en la tradición popular, y que dejará espacio para este posible tratamiento para orquesta sola. Las danzas, según recuerdo de Rimski-Korsakov, estaban disponibles todavía sin la orquestación, trabajo que hubo de realizarse en una noche de febril trabajo. Será una escena destinada a completar en segundo acto y tendrán una pretensión de embaucamiento entre los protagonistas. En conjunto, una serie de seductores episodios que comienzan por las danzas de las muchachas”. Con su graciosa nostalgia, antes de entrar en la “Danza de los muchachos”, de un ritmo frenético y la “Danza final”, un puro vértigo, un perfecto ensamblaje para una obra destinada a un éxito seguro.