La anestesista de Ayuso
Lo suyo es abrirse paso en un mundo de hombres. Primero le tocó asumir la portavocía de Más Madrid cuando Íñigo Errejón se fugó al Congreso nacional y luego negarle a Pablo Iglesias el camino de regreso a Vistalegre I. Cuando le dejaron asomar la cabeza, la anestesióloga Mónica García fue toda una revelación, un caso similar al de Díaz Ayuso, de cero a cien en el escaparate de la popularidad en tan sólo un par de sesiones en el hemiciclo. En el tres contra tres de géneros entre los candidatos a la Presidencia de Madrid, es la única aspirante de izquierdas. En el tres contra tres ideológico, su voz sobresale entre las de Gabilondo e Iglesias. Capaz de adormilar a Ayuso no con anestesia, sino con argumentos.