Sánchez anuncia unos indultos para la convivencia que cambiarán la historia

Admite que quienes aspiran a la independencia no van a modificar sus ideales, pero invita a un reencuentro con el que, según el líder de los populares, lo que hace el presidente es dar un “golpe de gracia a la legalidad”
'Procés'
Mario Álvarez
El presidente del Gobierno, en su conferencia en el Liceu bajo el título ‘Reencuentro: un proyecto de futuro para España’. Foto: David Zorrakino/E.P.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confirmó que el Consejo de Ministros aprobará este martes los indultos a los nueve líderes independentistas del procés, una medida que considera “necesaria” para la convivencia, que confía que cambiará la historia y que suma a millones de personas para la reconciliación.

Lo hizo en una conferencia en el Gran Teatro del Liceu de Barcelona ante trescientos representantes de la sociedad civil catalana, pero con la ausencia del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y de miembros de su Govern, según informa Efe al respecto.

El Gobierno había otorgado una gran relevancia a este evento y su convocatoria ya apuntaba a la inminencia de las medidas de gracia a los dirigentes soberanistas, una vez el trabajo previo estaba prácticamente finalizado.

Reencuentro: un proyecto de futuro para España, era el título de la charla, y sobre esa idea giró una intervención de algo menos de media hora, en la que incidió en la necesidad de afrontar el problema existente.

Pensando en el “espíritu constitucional de concordia”, avanzó que propondría al Consejo de Ministros de este martes la aprobación de dichos indultos.

“Lo vamos a hacer por la concordia. Lo vamos a hacer con corazón”, explicó entre aplausos de los asistentes, que se mezclaron con gritos en favor de la amnistía y la independencia de un miembro de Arran, organización juvenil vinculada a la CUP, y que portaba una estelada.

El presidente consideró que el indulto es “una figura necesaria en determinados momentos” que no cuestiona ni revoca la sentencia firme condenatoria, sino que es otro plano que corresponde al Ejecutivo.

Pidió que incluso quienes no lo comparten, reconozcan “su plena legalidad y su absoluta constitucionalidad”.

La razón fundamental es “su utilidad para la convivencia”, ya que entiende que sacar de la cárcel a quienes representan a miles de catalanes supone un rotundo mensaje de concordia y convivencia.

“La decisión no les afecta sólo a estas nueve personas, sino que se dirige al conjunto de la sociedad catalana y española, de ahí la clara utilidad pública de esta medida”, insistió el titular del Ejecutivo.

En esa línea, indicó que es un mensaje para miles de personas que les apoyaron, les apoyan y se sienten solidarias con su destino, y también para quienes discreparon de su conducta, pero que entienden que ya es suficiente el castigo que recibieron.

Aunque admitió que no piensa que quienes aspiran a la independencia vayan a cambiar de ideales, sí confió en que comprendan que no hay caminos fuera de la ley y se atengan al pacto constitucional.

Asumió que haya personas en contra de la medida y cuyas razones comprende, pero reivindicó las de quienes la defienden, y en las que dijo que pesan más las expectativas de futuro que los agravios del pasado.

El presidente del PP, Pablo Casado, respondió a este anuncio acusándole de dar un “cambio de régimen” utilizando el problema de Cataluña y por tanto, los indultos, como “coartada”. “Ha usado una medida de gracia para dar un golpe de gracia a la legalidad”, dijo.

El líder de la oposición escenificó desde el Parlamento, en una reunión plenaria de los grupos populares en el Congreso y el Senado, su rechazo contundente a la concesión de los indultos por el proceso soberanista.

“Sánchez aprovecha ese problema causado por el supremacismo de sus socios y el apaciguamiento del PSOE para dar continuidad a su proyecto de cambio de régimen”, insistió, y criticó la propuesta del ministro de Política Territorial, Miquel Iceta, de llevar una reforma constitucional para una España federal a la mesa de diálogo prevista con la Generalitat catalana.

Consideró que el jefe del Ejecutivo “destruye las bases del sistema de convivencia” y “desarma al estado” con iniciativas “letales” para el futuro de España como los indultos, la modificación del delito de “sedición a la carta” para los independentistas “fugados” o la pretensión de convocar un referéndum legal.

A su juicio, “blinda un segundo procés” al mantener las estructuras “ilegales” de la Generalitat o su propaganda y al no tipificar como delito el referéndum ilegal.

Asimismo, y tras el pronunciamiento matizado a favor de los indultos del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, o del Círculo de Economía, lanzó varias críticas veladas al empresariado.

Por ejemplo, al afirmar que el “desacato a la legalidad” y el “desfalco de soberanía” se había presentado en forma de “ópera bufa”, con “una platea subvencionada por los fondos europeos”, o al definir a los asistentes al Liceo como una “supuesta sociedad civil rota y débil, entregada a un Gobierno con dinero pero sin principios”. Y habló del “yugo clientelar del BOE”.

El PP ha anunciado ya acciones en los tribunales y desde Ciudadanos, Inés Arrimadas, también avanzó que “los constitucionalistas no se van a arrodillar”, “ni ante Sánchez ni ante sus palmeros”.

“No lo hicieron en 2017 ni en todos estos años de atrás y no lo van a hacer ahora en 2021”, advirtió tras criticar que el “único reencuentro” de Pedro Sánchez en Cataluña sea “con los golpistas del procés”.

Vox es otro de los partidos que anunció recursos a los indultos y su portavoz, Jorge Buxadé, dijo que “Sánchez ha ido a volver a arrodillarse ante el golpismo, el separatismo, la barbarie, la desorganización, el caos y la violencia en las calles”.