Un hombre con problemas mentales siembra la alerta al enviar un sobre con una navaja a la ministra Reyes Maroto

La Policía ha identificado al presunto autor del envío de una carta amenazante a la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, con una navaja en su interior que aparentaba estar ensangrentada. Se trata de un vecino de El Escorial con problemas psiquiátricos que había puesto su nombre y dirección reales en el sobre.

Mientras, la Policía Científica está investigando si existe conexión entre esta carta y las otras tres que contenían balas y que fueron remitidas el jueves al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; a la directora de la Guardia Civil, María Gámez, y al exvicepresidente del Gobierno y candidato madrileño de Podemos, Pablo Iglesias.

Antes de que se conociera este cuarto envío, y según informa la Agencia Efe, trascendía que el Ministerio del Interior acordaba reforzar las medidas de protección para los destinatarios de los tres anteriores “en atención a la valoración del riesgo por la actual amenaza” que representa el haber recibido esas cartas intimidatorias.

Ahora se trata de saber si hay relación entre esas cuatro misivas. Las tres primeras fueron remitidas a la sede de Interior -las de Marlaska e Iglesias- y a la Dirección de la Guardia Civil -la de Gámez- mientras que la última fue enviada a la sede de Industria.

La Policía Científica ya estaba analizando las tres primeras, si bien las pesquisas para dar con el autor o autores las centralizan los agentes de Información.

Científica busca restos de ADN y huellas, además de estudiar el papel y la caligrafía, pues en los tres envíos anónimos se incluyen varios mensajes manuscritos.

Por el momento, las fuentes de la investigación consultadas por Efe consideran que el autor de las tres primeras cartas es el mismo y ahora tendrán que determinar si existe algún nexo con el de la remitida a Reyes Maroto, respecto al que al menos, y a diferencia de los otros tres, hay un presunto autor identificado.

La ministra de Industria, tras conocerse que había sido también objeto de amenazas de muerte, anunciaba que había denunciado al remitente, dado que aparecía un nombre en el sobre, y aseguraba que se iban a adoptar las medidas oportunas para que esa persona dé su versión sobre el por qué de la misiva.

Respecto a si puede haber coincidencia entre la autoría de esta carta y las otras tres, dijo en la Ser que la misiva “es un poco distinta” que la suya porque tiene remitente, por lo que podría tratarse de un hecho aislado a diferencia de las primeras.

La carta de Maroto llegó al ministerio el viernes por la tarde en un sobre marrón acolchado y fue entregada ayer a su secretaria, que la abrió y avisó al jefe de seguridad, según la ministra, que detalló que el arma iba “camuflada” y llevaba un plástico que impedía ver lo que había debajo.

Subrayó además el clima de crispación que a su juicio se está viviendo en España, no sólo durante la campaña de las autonómicas de Madrid, sino desde hace ya meses en el Congreso de los Diputados, en los parlamentos autonómicos y en la propia calle, y consideró que con este tipo de amenazas “todos perdemos”.