Vox entrará por primera vez a formar parte de un gobierno autonómico en Castilla y León

Ley de violencia intrafamiliar, inmigración ordenada y memoria histórica, entre las medidas que recoge su pacto con los populares
Primer gobierno con la ultraderecha
Mario Álvarez
El presidente en funciones de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco (d), y el candidato de Vox a la presidencia , Juan García-Gallardo (i), sellan el pacto de gobernabilidad entre ambas formaciones tras el pleno de constitución del parlamento regional.EFE/NACHO GALLEGO

Castilla y León será la primera comunidad autónoma cogobernada por el PP y Vox tras un acuerdo suscrito este jueves que sitúa al popular Alfonso Fernández Mañueco de nuevo como presidente y como vicepresidente a Juan García-Gallardo (Vox), quien quiere que este modelo sea “un buen ejemplo” para otras autonomías, así como para el ámbito nacional.

En rueda de prensa conjunta, tras firmar su acuerdo de legislatura cuyo contenido trascendió únicamente tras finalizar su comparecencia, ambos coincidieron en que surge un gobierno “fuerte, estable y duradero”, en palabras de Mañueco, secundadas por García-Gallardo.

El acuerdo de legislatura que suscribieron el PP y Vox para la gobernabilidad de Castilla y León incluye entre sus acciones previstas la aprobación de una “ley de lucha contra la violencia intrafamiliar”, a la vez que actualizarán la norma vigente para “mejorar la atención a las víctimas”, especialmente de “menores, mayores, mujeres, personas con discapacidad o vulnerables”, informa Efe.

Así figura en el punto 10, en concreto en el apartado de las acciones de gobierno, que incluye en el 32 promover desde la Junta “una inmigración ordenada que, desde la integración cultural, económica y social, y en contra de las mafias ilegales, contribuya al futuro de Castilla y León”.

Éstos son dos de los puntos plasmados en el documento de 11 ejes y 32 acciones de gobierno suscritos por Mañueco y García-Gallardo, quienes rehuyeron la mayoría de preguntas sobre el contenido y se limitaron a celebrarlo, al evitar “cualquier fantasma de repetición electoral” y servir para ofrecer un gobierno: “Hemos garantizado lo que prometí, la estabilidad que prometí”, afirmó el líder del PP.

Preguntado sobre lo que más ha condicionado la negociación, dijo que “hay que proteger a las víctimas de la violencia, sea la que sea, machista, terrorista, por opinión, sexo, raza..., son principios que están en la Constitución”. “Eso queda meridianamente claro en el acuerdo”, aseguró.

Recalcó que el propósito es “mimar a las personas que son víctimas de todo tipo de violencia, incluida la que usted menciona”. En ese momento, la prensa le preguntó si se refería a la machista: “Sí, claro”, respondió Mañueco.

Vox había anunciado que quería derogar la Ley autonómica contra la Violencia de Género (2010), pero con el paso de los días renunció para limitarse a “tocar” la norma vigente, en el sentido de igualar las ayudas recibidas por todo tipo de víctimas y de poner fin a lo que consideran adoctrinamiento de género en los colegios, según lo manifestado por este partido durante las jornadas de negociación.

El texto añade que promoverán “una inmigración ordenada que, desde la integración cultural, económica y social, y en contra de las mafias ilegales, contribuya al futuro de Castilla y León”.

En Memoria Histórica plantean reivindicar la “historia común, entendida como elemento integrador para la reconciliación, combatiendo cualquier intento de quienes tratan de utilizarla para dividir a los españoles”.