Aumenta la presión en las ucis pero está lejos del nivel de la primera ola

El Arquitecto Marcide de Ferrol empieza a trasladar pacientes a Lugo // Galicia baja otra vez de los quinientos casos diarios y Sanidade observa una evolución positiva
María Arias
Un sanitario realiza una prueba de coronavirus a un vecino de Ribadavia . Foto: Brais Lorenzo

Los datos de la Consellería de Sanidade, actualizados ayer, apuntan a que se detectaron 489 nuevos positivos por coronavirus en las últimas 24 horas, tras efectuarse 8.327 pruebas PCR. El sábado las notificaciones habían sido 640. La importante caída se notó en todas las áreas salvo la de Santiago-Barbanza, con once casos más que el día anterior, y A Coruña-Cee, con uno más.

Así, en la de Vigo se detectaron 149 (65 menos), en la de A Coruña-Cee, 104; en Santiago-Barbanza, 63; en Lugo-A Mariña-Monforte, 62 (52 menos); en Pontevedra-O Salnés, 50 (14 menos); Ourense-Verín-O Barco de Valdeorras, 39 (4 menos); y en Ferrol, 22 (28 menos). Lo negativo fue la muerte de siete personas de entre 85 y 97 años, seis de ellas de residencias (tres del área de Ferrol, y una en las de Pontevedra, Ourense y Lugo) y completa la lista otra en su domilicio de A Rúa (Ourense).

Por el contrario, las unidades de cuidados intensivos (uci) de los hospitales mantiene su tendencia alcista y ayer eran ya 105 personas las que eran atendidas en críticos, 5 más que el día precedente. Mientras, los hospitalizados llegaban a 578, diez más. Esta presión propició ya el traslado de un paciente que permanecía ingresado en la planta del Hospital Arquitecto Marcide de Ferrol al tener ocupada sus 11 camas uci al Hospital Lucus Augusti, aplicando planes de contingencia.

Sobre la presión hospitalaria, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, comentó en una entrevista en la Radio Galega que en la comunidad está aún lejos de los peores momentos de la primera oleada de la pandemia. Y precisó que, pese a aumentar en un 40 por ciento los ingresados en las ucis durante las dos últimas semanas, estas unidades están a “un 43%” respecto al pico máximo de ocupación registrado en la pasada primavera, y los hospitalizados en camas convencionales se situán al 50% de entonces.

ALIVIO. Las últimas estimaciones sobre la predicción de la evolución de la covid-19 en Galicia basada en los datos del Sergas, que realiza a diario el grupo de Ingeniería Física de la Escuela de Ingeniería Aeroespacial del Campus de Ourense de la Universidade de Vigo, apuntan a que no solo se está estabilizando la segunda ola, sino que la curva parece apuntar a un descenso.

Así, tras constatar que el máximo de los casos totales activos y detectados en la segunda ola en Galicia se dio el pasado sábado, día 7, con 10.283 infectados, y que este domingo la cifra había descendido hasta las 9.298, el equipo de la Uvigo estima mediante un modelo de población susceptible, infectada o retirada de la infección (SIR), que ajusta los datos que cada día proporciona el Sergas, que el próximo viernes, día 20, los afectados serán 8.683.

Con solo sus propios datos, García Comesaña declaró que hay que tomar con “un optimismo prudente” la evolución de la pandemia, tras alcanzar un punto de “equilibrio estable” con el “freno” del crecimiento de contagios. No obstante, no piensa que ello signifique que Galicia haya alcanzado el pico de la curva en la segunda oleada de la pandemia.

“La tendencia [al alza] se detuvo pero no empezamos a descender de la forma que nos gustaría”, opinó el conselleiro, por lo que descarta por el momento levantar las medidas restrictivas que imperan en parte de la geografía gallega y que se van a mantener, al menos, hasta el inicio de diciembre. Un objetivo que fue marcado por el comité clínico, según recordó, para poder comprobar la efectividad de las medidas.

En cuanto a las restricciones comarcales ampliadas este fin de semana en Bergantiños (a excepción de A Laracha) y Ribadavia, señaló que podrían extenderse a más concellos, al precisar que el comité clínico monitoriza de forma “detallada” la evolución epidemiológica en A Rúa, Chantada y Sanxenxo, y el martes decidirá si se implantan.

En la entrevista radiofónica, recogida por Europa Press, García Comesaña anticipó que el comité clínico, además de seguir la evolución de la pandemia, está elaborando un protocolo de desescalada para definir cómo y bajo qué criterios se podrían levantar restricciones, ya que se confía en poder relajarlas en las próximas fiestas navideñas.

No obstante, el conselleiro advierte: “Todo el mundo estará de acuerdo en que va a ser una navidad diferente”. “Si todas estas medida ayudan a resetear el sistema podremos afrontar una navidad con algún tipo de restricción, pero disfrutando de encuentros”, señaló esperanzado.