La UE movilizará en España frente a la covid tres mil euros por habitante

“Hemos demostrado que la magia del proyecto europeo funciona porque, cuando pensábamos que era imposible, hay salida gracias al respeto y a la cooperación”. Son palabras del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, al término de una cumbre europea para responder a la crisis económica del coronavirus que fue calificada por todos los países partícipes como “histórica”. Tras casi cinco maratonianas jornadas, se convirtió en el más largo de en la historia comunitaria tras las cuatro que consumió el de Niza en diciembre de 2000. Tras un largo fin de semana iniciado el viernes, este martes los líderes de los 27 salían con una lluvia de 750.000 millones de euros para los países más afectados por la pandemia procedentes de una emisión de deuda común.

Además de “histórica”, todo el mundo está satisfecho: los más afectados porque reciben una gran cantidad de dinero que les ayudará en la recuperación; los contribuyentes al fondo porque, dicen, han puesto las condiciones para que los países afectados disfruten de ese dinero.

Italia. Es el país con mayor apoyo. El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, afirmó que “es un momento histórico para Europa y para Italia. Estamos satisfechos: hemos aprobado un ambicioso plan de recuperación apropiado para la crisis que estamos viviendo”. Recibirá 209.000 millones, 82.000 en forma de subvenciones y el grueso, 127.000, como créditos, dijo Conte.

España. Segundo país más agraciado –y también el segundo más afectado por la covid-19– en la Unión, el titular del Ejecutivo, Pedro Sánchez, habló de un “gran acuerdo para Europa y para España”, con el que se escribe una de las páginas “más brillantes de la historia de la Unión Europea”. Dijo que España mantiene -entre ayudas y préstamos– la cantidad del fondo que esperaba recibir, unos 140.000 millones, que son el equivalente a una inyección de cerca de tres mil euros (2.958 €) por habitante. Más de la mitad, 72.700 millones, serán transferencias o ayudas directas

Portugal. El primer ministro luso, António Costa, dijo que el acuerdo supone “una señal importante de confianza para el esfuerzo de recuperación económica y social” frente a la crisis del coronavirus. Destacó que su país tendrá disponibles “más de 45.000 millones de euros para los próximos siete años”.

Francia. El presidente francés, Emmanuel Macron, habló de “un cambio histórico de nuestra Europa y de la zona euro”, al poner en común una capacidad presupuestaria y abrir la perspectiva a recursos propios. Este país recibirá 40.000 millones en subvenciones del plan europeo de reconstrucción.

Grecia. El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, aseguró que “es una oportunidad única para Grecia y Europa de dar un gran paso adelante y no tenemos intención de desperdiciarla”. Del fondo de recuperación financiado con la emisión de deuda común perciben 19.000 millones como subvención y 12.500 serán créditos.

Alemania. La canciller alemana, Angela Merkel, afirmó que ésta es la respuesta “de la Europa unida” ante una situación que requería “respuestas extraordinarias”. Alemania se “conformó” con mantener el nivel actual del descuento que recibe por su contribución al presupuesto (3.670 millones anuales). En los próximos siete años espera recibir de los fondos 650 millones para las regiones del este del país y otro tanto para desarrollo agrícola.

Los ‘frugales’. Finlandia, Suecia, Dinamarca, Austria y Países Bajos se enrocaron para conseguir que aumentasen la parte de préstamos frente a las ayudas directas, que se pusieran condiciones –como la necesidad de reformar mercado laboral o pensiones– a quienes más recibían y para elevar los descuentos de sus contribuciones como países más ricos. Entre todos se ahorrán en siete años unos 53.000 millones, que tendrán que aportar otros países.

Holanda. Caudillo en este cónclave europeo de los cinco anteriores fue el primer ministro holandés, Mark Rutte, quién consideró que con el acuerdo los “intereses holandeses están bien protegidos”. Rutte dijo estar “satisfecho” con el resultado alcanzado porque se trata de “un paquete integral y bueno” para los más afectados por la covid-19 y celebró que, al final, “en los casos más extremos, se podría apretar el freno de emergencia si esos países no han hecho lo suficiente”.

Austria. El canciller federal austríaco, el conservador Sebastian Kurz, se congratuló de que se haya establecido un “control muy estricto” del uso de las ayudas financieras. A su juicio, se consiguió acordar el marco financiero y “lograr una respuesta adecuada a la crisis del coronavirus”.

Finlandia. La primera ministra nórdica, Sanna Marin, calificó de “bueno para Finlandia” el acuerdo de la UE. El Parlamento finlandés (Eduskunta) había rechazado el pasado junio la propuesta original de la Comisión Europea y cuestionado incluso la legalidad de la fórmula de préstamos y ayudas a fondo perdido.

Suecia. El primer ministro, Stefan Lofven, dijo que “hemos logrado un buen acuerdo para los suecos en unos momentos en que Europa se enfrenta a grandes desafíos. Con el paquete de recuperación estamos mejor equipados para manejar esta crisis y sus efectos económicos”. Su país mejora el descuento que percibía de su contribución al presupuesto comunitario, que pasa de 798 a 1.069 millones de euros.

Dinamarca. La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, dijo que “juntos hemos logrado unos resultados que son buenos tanto para el conjunto del bloque como para nuestro país”. “Han sido dos noches sin apenas dormir. Pero era necesario y ha valido la pena”, añadió la primera ministra, cuyo país logró aumentar el descuento de su contribución al bloque de 197 a 377 millones de euros anuales.