Ocho fallecidos en Galicia en las últimas horas: la mayor cifra de la nueva normalidad

Salvador Illa advierte que vienen semanas muy duras pero los datos en la comunidad aún siguen mejorando
María Martínez

Galicia cruzó en las últimas jornadas algunas líneas, unas buenas y otras no tantas, establecidas desde el inicio de la pandemia provocada por el coronavirus covid-19. Una fue la de superar los 25.000 infectados; otra la de los 20.000 que ya superaron la enfermedad y una tercera se refiere al medio millón de pruebas PCR realizadas. Toda ellas se vieron eclipsadas por una ciertamente negativa: las ocho víctimas mortales notificadas ayer suponen la cifra más alta desde que vivimos instalados en lo que se llama nueva normalidad y la mayor desde el 5 de mayo, cuando hubo nueve víctimas.

El cómputo se eleva a 765, tras los cuatro hombres que murieron: de 88 años, en el hospital de Verín; de 85 en Pontevedra; otro de 88 en el CHUS de Santiago, y de 84 años, en el hospital de O Barco. Las cuatro mujeres fallecidas son: una de 73 años en el Chuac de A Coruña; otra de 91 en el Chuvi de Vigo; la tercera de 97 años en el hospital de Ourense (procedente de la residencia Las Salinas); y una mujer de 77 años, fallecida en el Lucus Augusti de Lugo (residente en Domusvi de Outeiro de Rei).

Antes de estos ocho fallecidos, el peor dato, con siete, se repitió los días 9 y 28 de septiembre. Si volvemos la vista atrás ocho óbitos los hubo el 25 de marzo y las dos jornadas en las que hubo más muertos fueron el 3 y el 11 de abril con 29 personas que perdieron la vida.

¿Fue este dato de ayer un presagio de lo que anunciaba el ministro de Sanidad? Salvador Illa se mostró “muy preocupado” con la evolución de la pandemia: “A nuestro juicio, las próximas semanas van a seguir siendo muy duras, especialmente en territorios donde hay más positividad de las PCR y donde los porcentajes de ocupación de UCI y de fallecidos siguen siendo todavía altos”.

Una situación que, a la vista de las cifras que aparecen en los últimos balances, son menos graves en Galicia. Con menos de uno de cada cien habitantes infectados, figura entre las comunidades con menor incidencia acumulada de la epidemia. Sin embargo, la tasa de letalidad acumulada, es decir, el número de víctimas mortales en función del número de enfermos e infectados, se sitúa en el 3,45 %, no tan lejos de las de Madrid (3,93 %), Cataluña (4,11 %) o País Vasco (4,17 %), según datos de la Universidad John Hopkins (Baltimore, EEUU).

De los enfermos e infectados todavía activos figuran más de 300 personas mayores ingresadas en residencias y más de un centenar de trabajadores que los atienden, además de media docena de personas con discapacidad y más de una quincena que los cuidan. A ello hay que añadir entre doscientos y trescientos casos de escolares infectados y más de una treintena de aulas de colegios cerradas por contagios múltiples.

La tasa de ocupación de los centros de terapia intensiva UCI y de camas de hospital, de menos de 3 % y 4,6 %, respectivamente, es baja en comparación con el conjunto del resto de España, con porcentajes que triplican o cuadriplican esas cifras. También son buenas en lo que se refiere a la positividad de las pruebas PCR realizadas: un 4,5% frente al 10,4% del total del territorio español

Pero los casos nuevos de infección por coronavirus se mantienen desde hace varias semanas en alrededor de unos doscientos diarios, según datos del Ministerio de Sanidad. A pesar de ello, la incidencia acumulada en los últimos 14 días se mantiene en 110 casos por 100.000 habitantes (la media de España es de 254) que se reduce a 52,12 (frente a 104) en los últimos siete.