Primera caída mensual del gasto en pensiones por el coronavirus
El cómputo de la nómina de las pensiones contributivas de la Seguridad Social en España ascendió a un total de 9.852,78 millones de euros a fecha de 1 de mayo, lo que supone una caída mensual del 0,27 por ciento, en lo que supone el primer retroceso de la serie. Un retroceso atribuible al descenso del número de altas y al incremento de las bajas registradas como consecuencia de los efectos provocados por la pandemia del coronavirus, según recoge Efe.
En este sentido, y de acuerdo con los datos publicados ayer por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el sistema contaba a 1 de mayo con un total de 9.754.137 pensiones contributivas, 38.508 menos que las que había registradas el mes anterior.
A lo largo de abril se acentúo la tendencia de descenso en el número de pensionistas ya observada durante el mes anterior, que en el caso de la bajas en concreto tuvo que ver con que la mortandad provocada por el covid-19 afectó especialmente al colectivo de población de mayor edad, mientras que en el descenso de las nuevas altas influyó el cierre de las oficinas, lo que llevó a muchas personas a retrasar el trámite para su incorporación al sistema pese a tener la posibilidad de estar reconocidas por el mismo.
La Seguridad Social informó ayer de que en abril se registraron un total de 31.232 altas en el sistema, lo que representa un 13,9 % menos que el mes anterior y un 32,2 % inferior al mismo período del último ejercicio.
Si se considera el acumulado anual desde enero hasta el inicio de mayo de 2020, causaron alta 157.896 nuevas pensiones, lo que supone el 22,1 % menos que en el mismo período de 2019, y baja, 205.638 pensiones, lo que significa un 17,5 % más que el año anterior.
A lo largo de este ejercicio ha habido una reducción del 33,8 % en el número de expedientes iniciados en comparación con el mismo período del último ejercicio.
El ministerio no aportó ayer el dato de bajas registradas en abril, pero sobre acumulado se puede calcular que fueron un total de 69.857, el 61 % más que en marzo (43.370), y el dato más alto desde enero de 2015.
Del gasto total en pensiones, más de dos tercios de la nómina se destinaron al abono de las prestaciones de jubilación, cuyo montante ascendió a 7.049,44 millones, una cuantía que ha crecido un 3,02 por ciento en los últimos doce meses.
Del total de pensiones contributivas, 6.073.499 fueron por jubilación, 2.343.975 correspondieron a prestaciones de viudedad; otras 953.905, a incapacidad permanente; 339.814, a orfandad, y otras 42.944, pensiones a favor de familiares.
La pensión media del sistema, que comprende las distintas clases de prestación (por jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares), alcanzó los 1.010,11 euros mensuales, lo que supuso un aumento interanual del 2,03 %; mientras que la prestación media de jubilación ascendió a 1.160,6 euros, lo que representa un 2,02 % más con respecto a la cuantía del último ejercicio.
La prestación media por viudedad, por su parte, subió casi un 1,8 %, hasta los 724,6 euros mensuales.
Las pensiones correspondientes a las nuevas altas de jubilación fueron de 1.472,49 euros al mes, por encima de la media del sistema y un 9,8 % superior al importe de las nuevas en 2019.
El número de prestaciones de las clases pasivas en vigor en el mes de abril fue de 636.302, lo que situó la nómina en un total de 1.151,15 millones de euros.
En dicho período, última fecha disponible con estos datos, las pensiones correspondientes a las nuevas altas de jubilación fueron un total de 1.472,49 euros al mes.
Las del Régimen General llegaron hasta los 1.616,33 euros mensuales.