Se podría ya viajar entre provincias en fase tres desde el próximo lunes

Ábalos adelanta que sería posible desplazarse entre comunidades que compartan momento de desescalada// La Xunta ha planteado en numerosas ocasiones la movilidad por toda Galicia
Lorenzo Fernández
Un local hostelro de Huelva informa al público de las medidas para poder acceder al mismo. Foto: Julián Pérez/Efe

Los desplazamientos entre provincias de una misma comunidad o incluso entre autonomías que desde el 8 de junio estén en fase tres es una posibilidad que se abre con la sexta y última prórroga del estado de alarma, según explicó ayer el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos.

“Se puede establecer la movilidad dentro de una misma comunidad o entre autonomías que estén en la misma fase”, explicó Ábalos en una entrevista en TVE, recogida por Europa Press.

La sexta y definitiva prórroga del estado de alarma que el Gobierno solicitará al Congreso de los Diputados en la sesión de mañana contempla dejar en manos de las comunidades que entren en la fase III (la última prevista en el plan de transición) la duración y las condiciones de la misma, salvo en lo que respecta a la movilidad, aspecto que en principio seguirá controlando el Ejecutivo central.

El ministro explicó que si el estado de alarma termina el 21 de junio para todo el país, no será posible seguir restringiendo la movilidad entre provincias como hasta ahora.

Pero añadió que a partir del 7 de junio, con la última prórroga, será posible en aquellos territorios que estén en fase tres, si así lo deciden y la evolución de la epidemia lo permite, que se pueda “establecer un nivel de movilidad bien dentro de una autonomía o incluso entre comunidades que estén en una misma fase”, precisó el socialista.

Precisamente, la circulación entre provincias es una de las principales demandas de la Xunta de Galicia desde que comenzó el proceso de desescalada.

De hecho, su presidente, Alberto Núñez Feijóo, avanzó este domingo que, si el Estado delegaba en las autonomías la gestión de la fase tres, “una de las primeras cosas” que dictaría la Administración autonómica sería la de “recuperar la movilidad interprovincial”.

Así lo aseguró en la rueda de prensa posterior a la videoconferencia con el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, y el resto de líderes autonómicos.

Sin embargo, minutos después, el propio Sánchez comparecía ante los medios de comunicación y matizaba que será el Estado el que se reserve el control de la movilidad hasta el fin de dicha desescalada.

A pesar de las palabras de Ábalos de ayer, fuentes de la Xunta apuntan a Europa Press que habrá que esperar a a la publicación y aprobación del real decreto de ampliación del estado de alarma para conocer el alcance de esa delegación de competencias en fase tres, en la que toda la comunidad gallega espera entrar el próximo lunes.

De ser así, Galicia “asumirá la propia decisión, en el ejercicio de sus competencias, de recuperar la movilidad dentro de las cuatro provincias, las siete ciudades y los 313 ayuntamientos”, adelantó Feijóo en su rueda de prensa del domingo.

cuarentena a turistas extranjeros. Por otra parte, Ábalos confirmó el anuncio realizado por la presidenta balear, Francina Armengol, respecto a que la cuarentena impuesta a los turistas extranjeros se levantará el 21 de junio -cuando se ponga fin al estado de alarma, en el archipiélago-, adelantándose al 1 de julio previsto en un principio por el Gobierno.

Indicó que se trata de poner en marcha un proyecto piloto de “corredores seguros” para vuelos que tengan como origen y destino lugares con niveles bajos de contagios por coronavirus, como pueda ser también Canarias.

Esos días de prueba en los archipiélagos permitirán, por tanto, preparar la apertura más generalizada del país al turismo, añadió.

Entretanto, el 70 % del territorio español se encuentra desde ayer yaen la fase dos del plan de desescalada, mientras que las islas de La Gomera, El Hierro, La Graciosa (Canarias) y Formentera (Baleares) inauguran la fase tres, y la Comunidad de Madrid, Barcelona y su área metropolitana y Castilla y León continúan en la uno.

La mayor parte del territorio, algo más de 32 millones de personas están ya en la fase dos, que elimina las limitaciones para los desplazamientos de los niños y la práctica de actividad física no profesional, además de permitir reuniones de hasta quince personas, baños en la playa y la celebración de bodas con un límite de cinuenta invitados en recintos cerrados y de hasta cien en los que son abiertos.

Además, desde ayer las piscinas e instalaciones deportivas cubiertas pueden ser utilizadas en toda España, incluso en las zonas en fase uno, siempre y cuando no haya contacto físico entre los usuarios, que mantendrán dos metros de distancia de seguridad, y se respete un aforo máximo del 30 %.

Una semana después, a partir del 8 de junio, más de la mitad del país podría estar en la fase tres de la desescalada, en la que serán las comunidades las que decidan cómo administrar esta etapa y algunas ya se están preparando para recuperar el control de la gestión de la crisis.

De ello hablaron ayer los consejeros autonómicos con el ministro de Sanidad, Salvador Illa, durante la reunión por videoconferencia del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, en el que plantearon sus propuestas y peticiones para pasar de fase.

La cita se produce después de que ayer el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, anunciara que los presidentes autonómicos pilotarán el paso de la fase tres de la desescalada a la nueva normalidad.

Toda España, salvo la Comunidad de Madrid, Barcelona y su área metropolitana y buena parte de Castilla y León, podría entrar en la fase tres el lunes, siempre que no se produzcan imprevistos.

A partir de esa fecha, serán, por tanto, los Gobiernos autonómicos los que decidirán cuándo se levanta el estado de alarma en sus territorios, además del número de días que quieren estar en esa fase tres.

El anuncio del jefe del Ejecutivo fue valorado por la gran mayoría de las comunidades, si bien no colmó la expectativas del presidente catalán, Quim Torra, quien había reclamado nuevamente todas las competencias para apoyar la nueva prórroga de la alarma.

Comunidades como Galicia, País Vasco, Cantabria, Aragón, Navarra y La Rioja anunciaron su intención de solicitar ayer mismo el paso a la fase tres, mientras que otras como la Valenciana lo dejaban en el aire. Canarias y Baleares pedirán a lo largo de esta semana la incorporación de todas las islas de ambos archipiélagos a la fase tres, en la que ya están El Hierro, La Gomera, La Graciosa y Fuerteventura.

El vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, anunció su intención de permitir la movilidad entre provincias desde el lunes, fecha en la que la comunidad pasaría a esa situación, en una postura coincidente con las expuesta en numerosas ocasiones por Feijóo.

También estaba previsto que pidiera el paso a fase tres el País Vasco, cuyo lehendakari, Íñigo Urkullu, solicitó aclarar los plazos del fondo de 16.000 millones.

El titular del Ejecutivo valenciano, Ximo Puig, confía que en quince días sus habitantes se puedan mover entre provincias y a otras regiones en la misma fase, aunque la petición de cambio “se adoptará con total prudencia y sin tener más prisa de la necesaria”.