Arranca por fin la nueva depuradora después de tres décadas de espera

Con la adjudicación de la dirección de obra se supera el último trámite // Está previsto que entre en funcionamiento a partir de 2026
Luis Álvarez
Imagen virtual de la nueva estación depuradora de aguas que se construirá en A Silvouta

En enero se aprobó el convenio para la construcción de la nueva estación depuradora de Santiago, una obra que lleva esperando ya tres décadas, en las que la actual instalación se fue quedando cada vez más pequeña para hacer frente al crecimiento y las necesidades de la ciudad.

En junio se adjudicaron los trabajos de diseño y construcción y ayer el consejo de administración de la sociedad mercantil estatal Aguas de las Cuencas de España (Acuaes), del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, aprobó la contratación de los servicios de asistencia técnica a la dirección facultativa en la supervisión y control de la redacción del proyecto constructivo, la ejecución y control medioambiental de las obras, así como de la acometida eléctrica para el funcionamiento.

La adjudicación de este contrato representa un paso adelante en el desarrollo de la actuación, y la responsable del mismo será la Unión Temporal de Empresas Fulcrum, Planificación, Análisis y Proyecto, GOC SA, por un importe de 1.867.659 euros (IVA incluido) y un plazo de 47 meses. La intención es que la obra esté finalizada a lo largo de 2025 y entre en funcionamiento al año siguiente.

Capacidad. El objetivo de la actuación es que Santiago pueda depurar sus aguas residuales en las condiciones que exigen las normativas vigentes, resolviendo los problemas de capacidad de la actual depuradora y evitando vertidos al río Sar sin el tratamiento idóneo.

Para ello las nuevas instalaciones se diseñan con la previsión de puedan dar servicio a una población de 277.000 habitantes, cubriendo así las necesidades de las próximas décadas. También contempla la conexión a la red de colectores existentes y la ejecución de una nueva acometida eléctrica compatible con las necesidades energéticas de la nueva instalación y dotada de un suministro eléctrico de respaldo para garantizar su correcto funcionamiento.

Las obras se desarrollarán por fases, tal y como se recoge en el proyecto, y se ejecutarán en las proximidades de las actuales instalaciones de A Silvouta.

De esta forma, en primer lugar, se construirá en la parcela aledaña situada al norte de 6.000 m2 la instalación del futuro pretratamiento y del tratamiento primario.

A partir del momento en el que estas instalaciones estén en funcionamiento, se procederá a la demolición por fases de la actual depuradora, construyendo la nueva infraestructura que se irá poniendo en funcionamiento secuencialmente a medida que lo vaya requiriendo la demolición de la actual Edar.

La infraestructura contempla un pretratamiento con capacidad futura para 4,5 m3/sg, capaz de asumir las puntas de caudal que llegan por el emisario del río Sar en tiempo de lluvias. Dispone un tratamiento primario y de agua de tormentas mediante decantación lamelar para un caudal de 2,25 m3/sg y un tratamiento biológico por fangos activos, con membranas de ultrafiltración, que obtiene un vertido con calidad superior a la exigida para zona sensible. Para el tratamiento de los lodos se incluye digestión anaerobia con hidrólisis térmica, que permitirá la generación de energía para autoconsumo y el empleo en la agricultura de los lodos deshidratados.