la movilidad en la zona monumental

También abordará los problemas de la recogida de residuos y el nuevo alumbrado
Movilidad
El Correo Gallego
‘Bosque’ de bolardos en la entrada al casco histórico por la rúa de San Francisco. Foto: ECG

Santiago. El programa Smartiago, que tiene como objetivo buscar soluciones innovadoras para los principales problemas de la ciudad, especialmente los del casco histórico, donde el empleo de las nuevas tecnologías es mucho más reducido, continúa avanzando estos días.

Además de la dotación de fibra óptica a la zona para romper la brecha tecnológica que le impide competir en igualdad de condiciones con el resto de la ciudad, y que estos días ya se está instalando en la rúa do Franco, también está previsto mejorar otros aspectos como es la movilidad, la recogida de residuos sólidos, o la dotación de una nueva iluminación ornamental, que además de poner en valor los monumentos también contribuya a facilitar su conservación.

Para ello se han realizado una serie de consultas a las empresas de nuevas tecnologías, con el objetivo de que aporten propuestas de soluciones innovadoras que contribuyan a solventar los problemas que existen en la actualidad, y que sean adaptadas a una zona reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

En la junta de gobierno celebrada ayer en el pazo de Raxoi, se aprobó la designación de miembros del comité de expertos que se encargará de evaluar todas estas propuestas, con el fin de comprobar que se ajustan a los requerimientos y a las características del casco histórico.

miembros. Concretamente, serán José Manuel González, vicesecretario del concello de Santiago; Belén Hernández, gerente del Consorcio; y Cristina López Bravo, profesora titular del Departamento de Enxeñería Telemática de la Universidade de Vigo, quienes se encarguen de evaluar estas propuestas en las tres comisiones que están abiertas en la actualidad.

La primera de ellas, la de movilidad, pretende mejorar el tránsito en la zona histórica, especialmente en lo que se refiere al acceso de vehículos, evitando por un lado la proliferación de bolardos y elementos de control actuales que afean las principales entradas a la almendra, y sustituirlos por otros mecanismos más eficaces y, sobre todo, con un menor impacto visual. También se busca una solución para el reparto de mercancías que evite la presencia de vehículos de gran tonelaje en la zona y los consiguientes daños en el pavimento de enlosado. La solución pasaría por unas zonas externas de descarga y el uso en el interior del recinto de coches eléctricos.

Otra de las líneas de trabajo es la mejora de la recogida de residuos, algo fundamental en un espacio en el que abundan los negocios de hostelería y en el que no es posible colocar contenedores comunes por la necesaria protección del patrimonio.

Pero una de las innovaciones más importantes es la de la tercera línea, relacionada con la instalación de una nueva línea de iluminación ornamental para el casco histórico, que mejore la visión nocturna de los monumentos, pero que también sirva para protegerlos. En concreto, se plantea la instalación de luces que impidan la proliferación de microorganismos que tanto dañan la integridad de las fachadas históricas. ecg