El Camino bate récord absoluto tras superar ya los peregrinos de todo 2019

Se han entregado más de 348.200 compostelas en lo que va de año
Xacobeo 21/22
Uxío Santamaría
La Semana Santa fue el inicio de un bum de peregrinos que todavía se mantiene en la actualidad. Foto: Antonio Hernández

Todas las previsiones apuntaban, antes de que la pandemia empezase a asomar la patita, a que el Año Santo de 2021 iba a convertirse en un acontecimiento histórico, sobre todo en lo que se refiere en número de peregrinos. En 2019 nadie se podía imaginar que nos encontrábamos a las puertas de una crisis mundial, la movilidad internacional gozaba de todas las facilidades y el jacobeo era un fenómeno que había conseguido calar en numerosas sociedades, de Oriente a Occidente.

Por eso no resultaba un despropósito afirmar que se podía esperar muy probablemente hasta medio millón de peregrinos en el jubileo compostelano. Llegó la pandemia y se cargó todos los augurios.

Al papa Francisco debemos estar todos agradecidos, porque entendió perfectamente la situación y suya es la decisión de que el Año Santo haya sido en realidad un bienio jacobeo, con dos partes bien diferenciadas. Después de un 2021 todavía marcado por las restricciones de movilidad, el ejercicio que corre empezó con mucha más fuerza, cogiendo todavía mucha más intensidad a partir de Semana Santa. Ahora, con los últimos coletazos del verano, la peregrinación a la tumba del Apóstol se ha convertido en un fenómeno imbatible.

Lo demuestran los datos que maneja el Centro Internacional de Acogida al Peregrino, que acaba de confirmar que ya se ha batido el récord absoluto de peregrinos, es decir, se han superado las cifras alcanzadas en 2019, hasta ahora el mejor año de la historia del Camino de Santiago. La Oficina confirmaba ayer que ya han llegado a Santiago nada menos que 348.230 peregrinos. O al menos ese es el número de compostelas que se han entregado, una cifra que supera los 347.578 certificados que se entregaron en todo 2019.

La Xunta prevé que las estadísticas seguirán engordando a medida que avance el ejercicio, aunque con menor intensidad que durante los meses de primavera y verano, y que también se espera una buena resaca del jubileo en 2023. Eso sí, seguimos a la espera de la visita papal tan esperada, que por el momento no se ha producido, al parecer, por los problemas de movilidad del romano pontífice, que limitan mucho sus viajes.