Estrena la Catedral una iluminación ornamental un 60 % más eficiente
La Catedral de Santiago estrenó ayer iluminación interior, tras culminar un proyecto desarrollado en los dos últimos años por Iberdrola -a través de su Fundación en España-y el Cabildo de la Catedral, con el objetivo de revitalizar el templo en el Año Jubilar Compostelano y dotarlo de una luz que respeta tanto la historia como la realidad actual del monumento.
El acto de inauguración de la nueva iluminación contó con la presencia del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo; el delagado del Gobierno, José Miñones; el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán; el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio Barrio; y el deán, José Fernández Lago.
En su intervención, Ignacio Galán destacó que es “un verdadero honor para Iberdrola haber contribuido, una vez más, a la conservación de este templo, que hemos realizado con la misma emoción que tantos miles de devotos al llegar a Santiago, destino de todas las rutas de mayor peregrinación de la Cristiandad y centro neurálgico de tantos movimientos artísticos y culturales desde la Alta Edad Media”. Asimismo, añadió que “realizamos esta actuación en el más universal de los monumentos de Galicia, con la misma ilusión y el mismo compromiso con el que apostamos por esta tierra, que es la nuestra, impulsando la transición energética, el desarrollo industrial y la generación de empleo sostenible y de calidad”.
La luz de la Catedral, explicó, se ha expresado tradicionalmente en dos planos distintos. De una parte, la luz artificial, en un plano más o menos cercano al suelo por motivos de tecnología disponible y mantenimiento, con temperaturas de color cálidas y desplegada a través de soluciones como lampadarios de velas, palmatorias, lámparas votivas, etc. Por otro lado, la luz natural ha sido protagonista de los tramos más elevados. Una luz abundante y de temperaturas de color frías.
El proyecto actual se apoya en esta dualidad para generar una experiencia visual atractiva a visitantes y fieles. La secuencia de lámparas suspendidas en contraposición con la luz natural aportada por rosetones y cimborrio permite ordenar una narrativa que respeta tanto la historia como la realidad actual del templo.
La iluminación interior de la Catedral de Santiago está integrada en el Programa Iluminaciones de Iberdrola y se suma a otras colaboraciones desarrolladas en el santuario desde 2004 por la compañía, con la iluminación de la Puerta Santa, o la renovación total de la iluminación en 2015, junto al control e instalaciones eléctricas, de la Capilla Mayor y el Sepulcro del Apóstol.
En el acto también intervino el arquitecto responsable del proyecto de iluminación, Ignacio Valero, y el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, quien se refirió al nuevo sistema de luces “como la culminación de un largo y profundo proceso de restauración de la Catedral”.
El alcalde de Santiago, Sánchez Bugallo, proclamó en su intervención que “Galicia brilla hoy más que nunca y la Catedral de Santiago también”.